Al principio resultó extraño. Ahora, se confirma la torpeza que supuso. Microsoft Kin, la línea de teléfonos que se bautizó como Windows Phone ante de que se presentase el sistema operativo homónimo, se ha estrellado y sale de los planes de producción de la compañía de Redmond. Así se ha anunciado después de unas irrirosias ventas que algunos llegan a cifrar en 500 unidades desde su estreno el pasado mes de abril en el mercado estadounidense. Europa ni siquiera llegará a conocer esta gama compuesta por los Kin One y Kin Two.
En el país norteamericano, los móviles Microsoft Kin estaban siendo comercializados por la operadora Verizon, que ahora tiene la bochornosa responsabilidad de dar salida al estocaje previo a la parada de máquinas. Y es que ahora Microsoft tiene que deshacerse de miles de unidades a pesar de haber reconocido el estrepitoso fracaso que han supuesto estos móviles, que iban a suponer la avanzadilla comercial de su próximo sistema operativo, Windows Phone 7.
El principal problema que los analistas y especialistas del sector se toparon en su momento con los Kin One y Kin Two (que llegaron a España durante el Mobile World Congress del pasado mes de febrero) residía en lo que Microsoft enarbolaba como la clave de su malogrado éxito: un móvil para jóvenes que querían un smartphone sin la «complejidad» de un smartphone. Y es que estos terminales son aparentemente móviles con la vocación de plantar cara a los Android y iPhone, salvo por un importante detalle: la ausencia de una tienda de aplicaciones, alma máter del concepto actual de smartphone y nutritiva fuente de ingresos para las compañías.
Los Kin One y Kin Two estaban pensados para usarse como plataformas móviles para redes sociales. Y poco más. No tenían ningún factor de distinción que aportara algo más frente al resto, y se definieron por lo que finalmente ha lapidado sus intenciones: sus limitaciones lo han llevado al fracaso. A pesar de todo, Vodafone conserva los derechos de distribución en España, aunque parece poco o nada probable que la gama Microsoft Kin aterrice en nuestro país.
