En plena resaca tras la sombra de fraude en las pruebas presentadas por Apple en la corte alemana de Dí¼sseldorf contra Samsung, se ha sabido que el veto que pesaba en Europa para la comercialización de la última tableta de la firma surcoreana, el Samsung Galaxy Tab 10.1, ha sido derogado.
Aunque los tribunales germanos aún no han dado luz verde a la comercialización del dispositivo dentro de las fronteras del país, parece haber quedado reconocida la falta de competencia de las autoridades alemanas para impedir la venta del Samsung Galaxy Tab 10.1 fuera de la región.
Asimismo, la prohibición de vender el Samsung Galaxy Tab 10.1 sigue siendo extensible al resto de Europa, en el caso de que se traten de unidades distribuídas por la división alemana del fabricante coreano.
A causa de una disputa centrada en el supuesto uso no autorizado de patentes de Apple en el desarrollo de productos de Samsung, la multinacional con sede en Cupertino paralizó la comercialización de la última tableta de la empresa coreana (la primera con Android 3.1 Honeycomb).
La polémica saltó cuando desde un medio de comunicación holandés se mostró una de las pruebas presentadas por Apple en su argumentación contra Samsung, apoyando la tesis del plagio, en la que se puede advertir cómo la maqueta del Samsung Galaxy Tab 10.1 fue manipulada para que su parecido con el iPad 2 resultase lo más flagrante posible.
En cualquier caso, en principio no habría sido esta supuesta y aún no demostrada manipulación la razón por la que la directriz impuesta desde Alemania habría quedado derogada. Por contra, la base de este viraje estaría en el hecho de que la prohibición en la venta del terminal impuesta por la corte de Dí¼sseldorf no puede extenderse más allá de las fronteras del país, al menos, hasta que se esclarezcan los hechos denunciados por Apple.
Estos de Apple se están convirtiendo en una mafia. Demasiado poder económico para conservar la decencia y la cordura.
De cualquier forma, absolutamente todo está fuera de lugar. Ni Apple ni nadie puede prohibir a otra empresa que venda sus productos.
Por otra parte, ningún tribunal de un país europeo concreto tiene potestad para prohibir la venta de productos en otros países de la Unión.
Creo que todo este lío ha sido desde el principio un despropósito alimentado por el copy-paste de muchos desinformados que escriben en Internet.
Que les den morcilla a los de Apple.