El LG G2 se ha ganado buenas críticas por su perfil técnico, su autonomía y algunas de sus originales soluciones para la gestión de sus funciones. Pero en lo relativo al programa de actualizaciones se va a tener que llevar un buen tirón de orejas. Y es que no sólo ha sido el último de los gamas alta en comunicar cuándo recibirá Android 4.4 KitKat (lo más nuevo de Google para móviles y tabletas), sino que además coloca la llegada de la actualización muy tarde respecto a su competencia. Será a finales de marzo cuando los usuarios de este equipo empiecen a recibir la notificación para poner al día el terminal con la plataforma presentada el pasado mes de octubre por los de Mountain View.
¿Y cuál es la razón de la demora? La respuesta hace que la situación sea todavía más sangrante: el LG G2 ni siquiera dispone todavía de Android 4.3 Jelly Bean. Al menos, no en nuestro país. Los usuarios que dispongan de una unidad en formato libre del buque insignia de la multinacional surcoreana todavía están anclados en Android 4.2. Siendo así, se comprende la demora en la llegada de Android 4.4, habida cuenta de que antes tendrá que hacerse con la tercera y última edición de Jelly Bean antes de dar el salto a KitKat.
Cosa distinta sería que desde LG hubiesen optado por dar el salto, puenteando a la versión 4.3 del sistema y pasando directamente de la edición vigente en el LG G2 a Android 4.4 KitKat. Siendo así, se entendería el aparente retraso en comparación a su competencia, aunque sea un consuelo bastante discreto de cara a los usuarios que tengan en su poder una unidad de este modelo.
Con el LG G2, la compañía espera remontar un vuelo que perdió hace tiempo. Ha concebido un negocio cifrado en unos diez millones de terminales para este dispositivo en 2013, y aunque resulta bastante atractivo en prestaciones, la competencia que se supone a sí mismo con la presencia del Nexus 5 en el mercado, así como la necesidad de batallar con interesantísimos terminales disponibles en este momento, estrecha notablemente su espacio de acción para seducir al público interesado en móviles de primer nivel.
No obstante, la propuesta que supone el LG G2 combina con acierto un perfil técnico de excepción con la presencia de opciones exclusivas que ayudan a distinguirlo de equipos análogos. Entre los puntos más innovadores de este dispositivo destacan especialmente el control de bloqueo y desbloqueo del sistema con sólo golpear suavemente la pantalla con un toque doble.
Además, se desprende de botones frontales y laterales, desplazándolos a la trasera del terminal. La autonomía es otro de los aspectos en los que saca pecho el LG G2, consiguiendo jornada de trabajo que, en combinación de uso y reposo, pueden llegar a soportar un par de jornadas entre carga y carga. Por lo demás, es un móvil dotado de un potente procesador de doble núcleo, cámara de trece megapíxeles y una buena pantalla FullHD de 5,2 pulgadas.
