Vender tu móvil para revenderlo más tarde puede salirte realmente caro. Según los términos de servicio de Google, sus terminales sólo pueden comprarse para uso propio o para regalo, nunca para reventa. Alguien podrá pensar, ¿pero es que acaso Google puede enterarse de eso? que se lo pregunten a los cerca de 200 usuarios en EEUU cuya cuenta de Google ha sido cancelada.
Los usuarios que habían comprado sus teléfonos Pixel tenían un contrato con Project Fi, la operadora móvil virtual de Google, algo que facilitó su detección. Tras adquirirlos, llegaron a un acuerdo con un revendedor de New Hampshire a través de la web Dan’s Deals, que ofrecía repartir las ganancias generadas por la reventa a un precio superior. Pero las esperanzas de esos usuarios se han truncado al despertarse un día y descubrir que no podían acceder a sus cuentas de Google Drive o Google Fotos, y que no podían enviar ni recibir mensajes en sus cuentas de Gmail. La todopoderosa Google les había cazado.
En palabras de un representante del buscador, «Identificamos una trama en la que a algunos consumidores se les pedía que comprasen teléfonos Pixel en favor de un revendedor que los volvía a sacar al mercado con un coste superior. La reventa comercial de nuestros dispositivos a través de Project Fi o la Google Store está prohibida. Esto es así para que todo el mundo tenga la misma oportunidad de comprar terminales a un precio justo. Muchas de las cuentas suspendidas se crearon únicamente para llevar a cabo esta operación. Tras hacer una investigación, restauraremos las cuentas genuinas que actualmente están en situación de suspenso.» Por su lado, desde la web Dan’s Deals se informa que están dispuestos a devolver los teléfonos Pixel adquiridos si con ello se normaliza la situación. Sin embargo, las cuentas todavía no han sido restauradas, tal vez Google está queriendo prolongar la agonía de los usuarios para dejar claro que no se puede jugar con los términos de su servicio, y principalmente que el que los viole no saldrá impune.
Problemas de abastecimiento
No es novedad que la demanda de teléfonos Google Pixel ha sido tan alta que ha superado todas sus previsiones y ha desajustado su proceso de envíos, el cual está sufriendo muchos retrasos, diciéndose primero que los teléfonos llegarían a principios de noviembre, fecha que ahora se ha retrasado a finales de mes, en especial en el caso de los Google Pixel de 128 GB. Siempre que hay casos de este tipo, el mercado de segunda mano adquiere una importancia decisiva, y los precios se disparan. Ocurre con todos los grandes productos tecnológicos de tecnología punta en sus primeros meses de vida, hasta que finalmente la demanda y la oferta llegan a un ajuste. Mientras tanto, la tentación de sacar un beneficio de la situación es alta, y generalmente, no implica ningún riesgo real. No ha sido el caso de estos 200 usuarios de Google, que nos harán pensarnos dos veces a los demás a la hora de revender nuestro teléfono.