Nuestros móviles son cada día objetos más y más preciados. No sólo por el precio que nos han costado, sino por la cantidad de información sensible que guardamos en ellos: archivos gráficos, documentos, tarjetas de crédito y mucho más. Por ello, la protección de nuestro móvil ante robos o intromisiones es vital. Actualmente tenemos muchas opciones disponibles para garantizar esa seguridad: código PIN, patrón, reconocimiento por voz, contraseña, lector de huellas…. En este artículo os vamos a dar un breve paseo por todas ellas y analizaremos sus pros y contras.
PIN
Medida archiconocida para desbloquear la tarjeta SIM de nuestros teléfonos, también se puede aplicar para desbloquear la pantalla cuando el teléfono está en reposo. La característica que define al PIN es que es una combinación de cuatro números, por lo que es fácil de recordar y de teclear cada vez que encendemos el teléfono. También ése es su aspecto más débil, es la más fácil de descifrar, especialmente si la hacemos coincidir con el PIN de la tarjeta, algo que ocurre a menudo. Sin embargo, si no caemos en la pereza, puede convertirse en el método más equilibrado de todos.
Patrón
El patrón es un sistema donde el usuario dibuja una figura, generalmente geométrica, uniendo puntos dentro de una serie de nueve. Las posibilidades son inmensas, sólo limitadas por los ángulos rectos y la memoria del usuario. El lado positivo de esta forma de desbloqueo es que es muy difícil de descifrar, pero por otro lado, también es fácil de olvidar, ya que las figuras posibles en el fondo son bastante parecidas. Este sistema tuvo su auge hace cuatro o cinco años, pero en la actualidad ha caído un poco en desuso, especialmente desde la llegada de los sensores de huella dactilar (aunque se pueden enlazar igualmente).
Contraseña
El tipo de desbloqueo por excelencia de los PC también llegó con el tiempo a los smartphones. Al escribir una contraseña, podemos compaginar tanto letras como números. Inicialmente solían tener una extensión de 4 a 6 caracteres, pero actualmente podemos personalizar contraseñas de hasta 17 caracteres.
El lado positivo de estas contraseñas es que ofrecen un nivel muy alto de seguridad (dependiendo también de qué tipo de contraseña pongamos, claro) debido a la extensión y a la combinación de elementos alfanuméricos. Si utilizamos una contraseña que ya hemos usado en en otras páginas, eso también nos ayudará a recordarla con facilidad.
El lado negativo, sin embargo, es el tiempo que podemos perder para teclear la contraseña cada vez que consultamos el móvil (que algunos estudios cifran en más de 100 veces al día). En nuestro PC tenemos la opción de guardar la contraseña, pero aquí eso no tendría ningún sentido, por lo cual este método puede llegar a desquiciar al usuario con tanto teclear.
Huella dactilar
El lector de huella dactilar para móvil lo inauguró Apple con su iPhone 5S en 2013 bajo el nombre de Touch ID, y lentamente ha ido conquistando casi todos los modelos actuales de gama media y alta, convirtiéndose casi en un elemento indispensable. A veces colocado en la parte de delante, otras veces en la parte de detrás, con este lector podemos registrar varias de nuestras huellas dactilares y así tener un desbloqueo rápido y seguro.
Prácticamente imposible de falsificar, la huella dactilar se ha revelado como un medio muy apreciado por los usuarios. Nos permite también acceder de manera rápida a ciertas apps con contraseña, como las de bancos, y también se usa para realizar pagos mediante plataformas como Samsung Pay, Android Pay o Apple Pay.
En el lado negativo tenemos que en última instancia nos obliga a establecer un segundo sistema de seguridad, para el caso en que el lector fallase, algo que dependiendo del modelo pasa con mayor o menor frecuencia. Los dedos húmedos o una presión insuficiente sobre el lector suelen ser algunos de los motivos para que no funcione. Por esta razón, en términos de desbloqueo del terminal estamos igual que si no hubiese lector, ya que nos vemos igualmente obligados a elegir uno de los otros sistemas.
Desbloqueo por voz
En algunos dispositivos, como el ZTE Blade V7 Lite, encontramos un método alternativo de desbloqueo, consistente en un comando de voz. Para llevarlo a cabo tenemos que grabar una palabra que tenga entre 3 y 6 sílabas, y la debemos repetir, para que el sistema reconozca bien nuestra forma de pronunciarlo y entonarlo.
Este sistema puede ser útil para personas que tengan problemas de visión, a los que les suponga un problema estar fijándose en los caracteres cada vez que abren el teléfono. Sin embargo, es una opción que tiene unos cuantos problemas que vienen aparejados a su uso:
Primero, el reconocimiento de voz falla fácilmente y nos acaba llevando de vuelta a un PIN, patrón o contraseña para confirmar la seguridad. Segundo, nos pone en una situación incómoda de tener que estar repitiendo palabras en voz alta cada vez que queremos desbloquear el teléfono, algo que, como hemos contado antes, realizamos innumerables veces al día. En una conferencia, un concierto o en la biblioteca, puede ser un auténtico problema. Además, no está claro si ofrece un grado muy alto de seguridad, ya que la voz es fácil de imitar.
iPhone y los códigos
El equipo capitaneado por Tim Cook siempre ha ido un poco a la suya en casi todo, por eso tenemos que hacer un apartado especial sólo para hablar de ellos y su iPhone en materia de seguridad. iPhone originalmente ofrecía un PIN de cuatro dígitos, pero desde iOS 10, si queremos cambiar el bloqueo de la pantalla se nos da la opción automática de cambiar a un código de seis caracteres, mezclando letras y números. Si seleccionamos Opciones de código, podemos volver al PIN de 4 dígitos, o crear un código numérico de infinitos dígitos. Nada de patrones, Apple nunca los ofreció.
Futuros sistemas
La tecnología avanza sin parar, por lo que cada vez nos encontramos con nuevos sistemas que se postulan para definir mejor la seguridad de nuestros dispositivos. Uno es el escaner de iris, del que recientemente hemos hablado, pues se rumorea que el próximo iPhone podría incluirlo entre sus características. Apple no sería pionero, ya que Samsung se adelantó ofreciéndolo en el Galaxy Note 7.
El reconocimiento facial también es una técnica que está en proceso de desarrollo, aunque ya existe hace algún tiempo, todavía no parece estar listo para su uso masivo. La idea es que a través de la cámara, se reconozcan nuestras facciones faciales con suficiente precisión como para diferenciarnos de cualquier otra cara, y así, ofrecer una identificación segura y rápida.
Conclusión
Hemos visto un abanico grande de métodos para desbloquear nuestro teléfono, algunos de hecho requieren una combinación entre ellos. Una vez vistas las características, la mejor opción pasaría por usar el lector de huellas dactilares combinada con un PIN, fácil de recordar y de teclear. Además, si nos alejamos de fechas como nuestro nacimiento o aniversario de pareja, nos garantizará seguridad en los preciados datos que guarda nuestro smartphone.
