Hace apenas unos años que se han desatado las rivalidades. Al principio de los tiempos, cuando los teléfonos móviles eran zapatófonos y pesaban como un ladrillo, el mundo de las marcas se había desarrollado de un modo muy práctico. El usuario seleccionaba el primer teléfono móvil que tenía a su alcance y esperaba de él que durase toda la vida. ¡Qué lejano queda aquello! Pero la era de las firmas punteras y del fenómeno fan no ha tardado en florecer. Quién nos iba a decir que además de ser fanáticos de Michael Jackson podíamos serlo de Nokia, de Android o del iPhone.
Diez años después de haber cruzado el siglo XX, son muchas las firmas que están en lucha por hacerse con el liderazgo y con la aprobación de los usuarios más experimentados. La finlandesa Nokia ha estado entre nosotros desde 1960 dedicándose a las telecomunicaciones, aunque no fue hasta 1999 cuando la compañía lanzó al mercado popular un móvil mítico: el Nokia 3210. Robusto como él solo, fueron muchos los usuarios que lo llevaron eternamente en el bolsillo, con el ánimo de convertirlo en un dispositivo tan resistente como legendario. Tardaría poco en llegar la fiebre por las nuevas tecnologías móviles, la estética de los teléfonos y un mundo abierto de posibilidades que nunca habríamos podido imaginar.
A lo largo de estos años, Nokia ha conseguido hacerse con el 35% de las ventas mundiales y hasta 2014 promete liderar el mercado junto a Android. Pero lograr este porcentaje ha costado lo suyo. Las cifras nos hacen pensar que parte de la población movilizada está dispuesta a seguir apostando por Nokia, una marca que a lo largo de los años ha sido seleccionada por disponer de un sistema operativo fácil, apto para todos los públicos. Y no es de extrañar.
Hasta la fecha, Nokia dispone de un catálogo muy amplio, al que pueden acogerse distintos perfiles de usuarios, sin importar su bagaje tecnológico o sus preferencias estéticas. Tanto es así que la finlandesa ha elaborado un estudio en el que se cifra la tipología de usuarios que suelen adquirir terminales Nokia. El 29,1% corresponde al porcentaje más alto y define a los clientes más jovenes, también etiquetados por Nokia como exploradores. Sin duda, estaríamos hablando de un perfil que sigue buscando el teléfono ideal y que disfruta viendo nuevos modelos. Un amplio 13,9% enlaza directamente con los amantes de la simplicidad.
Y es que buena parte de los usuarios Nokia eligen sus teléfonos por incorporar un sistema operativo sencillo, con accesos directos a mano y funcionalidades clarividentes. Muy ligados a este perfil encontramos dos porcentajes que corresponden al 10,9% y al 8,6%, representando los usuarios más familiares o los que ya tienen su vida familiar estructurada. Y tampoco hay que olvidar a los que Nokia llama líderes tecnológicos, los que prueban, testean y van al acecho de las últimas novedades. Configuran un 7,1% del total de usuarios, junto al 5,8% que Nokia define como estilistas de la tecnología.
Los que buscan teléfonos funcionales también forman parte de este pastel Nokia. Tanto es así, que en la actualidad, el 6% de clientes Nokia corresponde al de los líderes pragmáticos. Los que seleccionan un teléfono dependiendo de la respuesta que éste va a darles en ciertos momentos de su vida personal y profesional.
Lo cierto es que sería muy fácil asociar un teléfono móvil Nokia para cada usuario tipo. De hecho, la finlandesa cuenta con un catálogo muy amplio que responde a las necesidades de cada sector: móviles económicos, caros, elitistas, sencillos, pragmáticos, profesionales, musicales, multimedia, lucidos, punteros, básicos, fotográficos… Un largo etcétera precede a esta retahíla de adjetivos.
Así son los compradores de móviles de Nokia y así es la amplia gama de producto. Un arsenal de modelos que permite competir con fuerza en un mercado cada vez más competitivo. Y es que en los últimos años hemos visto la llegada de marcas que aumentan poco a poco la cuota de mercado (como LG o Samsung), móviles que se han convertido en todo un icono como el iPhone y un sistema operativo como Android de Google que es una clara alternativa al Symbian de Nokia. Como afirmaba recientemente un directivo de Nokia España, «este sector es muy cambiante. El lunes te levantas con una situación y el viernes por la tarde la industria ha cambiado totalmente».