Con el Samsung Galaxy 3, la coreana pretende llenar el hueco que existe entre el Samsung Galaxy 5 y el Galaxy S. Lo consigue, con un móvil de precio reducido y prestaciones medias, que como teléfono se porta bastante bien. Los tonos de llamada suenan bien, pero sin excesos. En algunas ocasiones incluso con un cierto tono apagado porque sólo tiene un altavoz en mono.
Resulta curioso, porque luego incorpora sonido envolvente con 5.1 canales a través de sus auriculares, toda una sorpresa que ayuda a sacar a un mejor la esperienceia con los vídeos DivX y XviD, que reproduce sin tener hacer una conversión el ordenador personal. El manejo es sencillo, y el operativo Android tiene un enfoque que facilita la conexión y la administración de contactos en las redes sociales. La autonomía es muy buena.
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