Google a anunciado a través de su cuenta de Twitter que el proceso de actualización de sus móviles de cabecera, los Nexus One y Nexus S, ya ha comenzado. El sistema con el que se pondrán al día, es, como de costumbre, mediante actualización por aire (conocido como OTA), y la versión que podrán instalar será la Android 2.3.3, la última edición de la plataforma también conocida como Gingerbread.
Por las características de este tipo de actualización, el proceso podría dilatarse unas semanas hasta que todos los usuarios que lo deseen lleguen a actualizar el sistema, según advierten desde la propia Google. Entre los principales atractivos que trae consigo la nueva versión de esta plataforma, destaca especialmente el soporte nativo para funciones de comunicación NFC, que es ese chip con el que, entre otras cosas, podríamos usar el móvil para pagar nuestras compras y servicios, como si de una tarjeta de crédito se tratase.
A través de Android Central, hemos sabido que el proceso de actualización comenzó anoche, y como decismo, se podría dilatar varias semanas en adelante. Siendo así, se confirma que antes de que pudiésemos ver la última versión de la plataforma en dispositivos de otras marcas, Google se habría reservado el estreno en exclusiva de Gingerbread en su anterior buque insignia, el Nexus One, tal y como se venía especulando.
Por otro lado, la actualización Android 2.3.3 no sólo estaría equipada de soporte para NFC, sino que también vendría a corregir algunas incidencias registradas con el funcionamiento del Nexus S. Y es que si bien la versión anterior, Android 2.3.2, sirvió para evitar envíos no autorizados de mensajes SMS, con esta edición que se empezó a lanzar anoche se trata de arreglar el problema que muchos usuarios están experimentando cuando su móvil se reinicia solo.