El debate sobre los aranceles que las operadoras querría ponerle a las empresas que operan en Internet vuelve a reabrirse. Esta mañana se ha sabido a través de la publicación Bloomberg que las principales operadoras europeas (identificadas por la fuente de la información como Orange, Vodafone, Telefónica y Telecom Italia) estudian negociar con algunas de las compañías cuyos servicios se sostienen en la red el pago de una tasa.
Este impuesto, que según las operadoras implicaría el paso por caja de Google, Facebook, Apple o Yahoo (por ser las principales compañías desarrolladoras y fabricantes de servicios que pasan por el tráfico de datos), serviría para costear las cada vez más saturadas redes móviles.
Según ha detallado Bloomberg, las compañías que suministran servicios de telefonía móvil identifican a las citadas empresas de Internet por copar el ancho de banda con sus productos, una razón que consideran más justificante de su intención de hacerles costear parte de los gastos que implica el mantenimiento y mejora de las líneas. Y a todo esto, ¿qué opinan las corporaciones afectadas?
Como cabrían esperar, las empresas a las que se responsabiliza de los picos de actividad de los usuarios en el consumo de datos no dan crédito a las declaraciones de las operadoras. Y no dan crédito en ninguno de los sentidos.
Por el momento, no hay una postura oficial en torno a este renovado y recurrente tema de debate, pero pocas son las apuestas que dan por válida una victoria de las operadoras sin que las proveedoras de servicios y aplicaciones presenten algo de batalla.
En cualquier caso, según continúan señalando las fuentes de Bloomberg, el gasto en infraestructuras que den cobertura a la superdemanda de datos crecerá casi un 30 por ciento en los próximos años hasta 2014, lo cual implicaría una reducción en los beneficios de las operadoras si quieren hacer sostenible el crecimiento en el mercado del número de usuarios que cada año se incorporan al consumo del tráfico de datos.