Durante los dos últimos años, la banda ancha móvil ha tenido un gran éxito en todo el mundo. Sin embargo, es un mercado que está madurando rápidamente. Aunque va a seguir creciendo, ya no va a poder hacerlo a un ritmo tan acelerado. El gran escollo para los operadores móviles es que cada vez va a ser más difícil encontrar nuevos clientes que quieran una conexión de banda ancha móvil; los que necesitaban una ya la tienen.
Un reciente informe de la consultora de telecomunicaciones Analysys Mason apunta que se puede haber alcanzado el techo de clientes de Internet móvil. Las probabilidades de convertir en cliente de banda ancha móvil a la mayoría de los que no están interesados son escasas. Muchos están muy contentos en su acceso a Internet fijo y no piensan cambiarlo, al menos a corto plazo. Otros no quieren la banda ancha móvil porque es demasiado cara, porque carece de cobertura suficiente, porque es poco fiable, o porque no es suficientemente rápida.
La cuestión es que la proporción de clientes que no están interesados en la banda ancha móvil ha aumentado desde el año pasado, ya sea porque están satisfechos con la banda ancha fija o porque no necesitan ninguna clase de acceso a Internet, según el estudio de Analysys Mason. Además, el cambio de operador en la banda ancha móvil es mayor que en otros servicios de telecomunicaciones, debido a que no hay un número de teléfono asociado y a que es más fácil hacerlo con un acceso móvil que uno fijo.
Va a resultar complicado retener a los suscriptores actuales de conexiones de banda ancha móvil, ya sea porque la cancelan definitivamente, o porque se pasan a otra compañía. Los operadores móviles están atrapados entre la amenaza de perder suscriptores y la oportunidad de robar clientes a la competencia. En ese escenario, competir en precio puede funcionar a táctica inmediata, pero no como estrategia a largo plazo.
Para mantener la clientela, los operadores móviles deberán concentrarse en atender bien al cliente, una solución que no es barata, pero que es la que más influye en el grado de satisfacción de los clientes, concluye el informe de Analysys Mason. Dicho estudio ha sido elaborado a partir de 6.000 entrevistas realizadas en Alemania, España, Estados Unidos, Francia, Polonia y Reino Unido.
Poco a poco irán abriendo los ojos, hace tiempo que todos sabemos que la buena atención es un valor agregado y da ganancias, y aunque las empresas lo saben, es en lo que menos invierten.
En mi propia experiencia tuve un conflicto con una empresa en particular por la mala atención y hoy día en sus campañas recibo sus llamadas 1 o 2 veces al mes, y mi respuesta es la misma "no gracias, su servicio aunque sea a costo cero es caro, no respetan al cliente".
De acuerdo con lo del respeto al cliente. En mi pais tambien se abusa mucho de ellos, pero para cobrar siempre están listos!