El Via Crucis de HTC parece no tener fin. La compañía taiwanesa no cesa en su empeño por acomodarse en los puestos altos del mercado de telefonía inteligente, pese a que, trimestre tras trimestre, los resultados financieros que arroja se tiñen de un cada vez más preocupante rojo sangre. La firma ha presentado sus balances para el tercer trimestre de este año, y los resultado vuelven a poner en la picota sus aspiraciones. En un informe que analiza la situación de la compañía ante los inversores ha quedado reflejado que entre julio y septiembre de 2012 se registraron unas ganacias netas de 133 millones de dólares, lo que supone un derrumbe del 79 por ciento.
En la tasa interanual, los ingresos cayeron según estos datos un 48 por ciento, situándose en un total de 2,4 mil millones de dólares. Con esto, se confirma el propósito de enmienda que debe esgrimirse en las altas esferas de HTC, habida cuenta de que a tenor de estas cifras, la compañía afronta la recta final de 2012 cerrando el peor ejercicio trimestral desde 2006 ””una fecha que no es baladí, dado que fue en 2007 cuando se puso a la venta el primer iPhone de Apple, y con él, el huracán que azotó el incipiente mercado de la telefonía inteligente.
El reto en este momento pasa por dos líneas comerciales en las que HTC no tiene una presencia especialmente predominante. Por un lado, el ecosistema Android cada mes está más bajo el dominio de la surcoreana Samsung, por un lado, y por las firmas chinas capaces de ajustar su margen de beneficio al mínimo en favor de una significativa y creciente cuota de mercado, como Huawei. Por otro, el entorno Windows Phone ha tenido hasta este momento una predilección por Nokia que resulta razonable si se tiene en cuenta la alianza estratégica que sostiene Microsoft con la finlandesa desde febrero de 2011.
No obstante, en la presentación de los nuevos equipos con Windows Phone 8 desarrollados por HTC, el consejero delegado de la empresa norteamericana, Steve Ballmer, hizo patente un vierto viraje hacia Taiwán a la hora de calentar la almohada de un fabricante en concreto ””y las reacciones en Nokia, de hecho, sirvieron para rubricar la sospechosa actitud del mandamás de Microsoft. Así las cosas, y considerando que los análisis de consultoras como IDC dan por sentado que Windows Phone podría ser el segundo ecosistema en cuota de sistemas para 2015, el interés de HTC por este entorno estaría más que justificado con vistas a aferrarse al madero que flota en medio de la tormenta que azota a un mercado en el que pocos fabricantes flotan con soltura.
En estos momentos, las propuestas de HTC para los próximos meses se ciñen, en la gama alta, a los HTC Windows Phone 8x y HTC One X+, equipos de reconocido interés para los ecosistemas de Microsoft y Android, respectivamente, los cuales además hacen gala de unos perfiles técnicos de gran atractivo de cara al usuario.
