Estos días estamos asistiendo a un aumento en la frecuencia e intensidad de rumores acerca del próximo móvil que presentaría Apple. Supuestamente, en poco más de un mes los de Cupertino levantarían el telón del que ya se está dando en llamar iPhone 5C, que sería el primer modelo del manzanófono lanzado bajo la filosofía de terminal de gama media. También se espera que llegue un nuevo primer espada, aunque sus características son algo más escurridizas, y resulta un poco más difícil determinar a priori cómo sería el que provisionalmente se viene conociendo como iPhone 5S o iPhone 6.
Precisamente, por la dificultad que surge para poder determinar con precisión, y a falta de datos oficiales, cómo serían uno y otro, se hace complicado atribuir la última prestación revelada por iOS 7, el sistema operativo que Apple estrenará en septiembre para iPhone y iPad, a través de una de sus ediciones de pruebas para desarrolladores. Dicha prestación no sería, ni más ni menos, que el cacareado escáner de huellas dactilares que se instalaría en el emblemático botón de inicio del teléfono de Apple.
El descubridor de esta característica habría sido Hamza Sood, un desarrollador que mientras investigaba las características disponibles en iOS 7 Beta 4 ””la última que se ha liberado hasta el momento”” dio con una carpeta llamada BiometricKitUI. Dentro de ésta, y olfateando entre las líneas de código, se reveló un apartado que da poco margen a la imaginación: fingerprint. En este punto, se describen algunos de los comportamientos asociados al marcado de huella dactilar, como su ubicación en el botón de inicio del dispositivo, la posibilidad de que cambie de color para señalar el proceso de escaneo y reconocimiento o que pueda reconocer la marca del pulgar mientras realiza una fotografía.
Dado que la descripción de todo esto parece asociarse con el reconocimiento biométrico del usuario, parece más que probable que Apple haya concebido esta característica como parte de la seguridad del dispositivo. Así se entendería la combinación de escaneo de huella con la captura de imagen en simultáneo, con lo que nos encontraríamos con un sistema combinado que, para determinadas operaciones ””desbloqueo del terminal, acceso a ciertas áreas del sistema, verificación de cambios en la configuración, etc””, requeriría de la comprobación de la huella del usuario y del reconocimiento facial del mismo. De este modo, tratarían de dar un paso más respecto a lo que presentó Google con Android 4.1.
Con todo, resulta imposible poder saber si esta característica estará disponible en el iPhone 5C ””el supuesto modelo económico”” o en el iPhone de alta gama, o quizás en ambos. No obstante, el hecho de que Apple haya puesto ya en circulación la cuarta versión de pruebas de su sistema operativo para móviles y tabletas invita a pensar que la fecha de presentación de sus nuevos dispositivo estaría muy cerca, por lo que sólo habría que tener algo de paciencia hasta el momento en que los de Cupertino levanten el telón y dejen al descubierto sus argumentos para competir con Samsung, Nokia, Sony y, cómo no, Google.