3 soluciones para un móvil Android que no tiene microSD

En los últimos años, la ranura para tarjetas microSD se ha ido convirtiendo en una caracterí­stica cada vez menos común en los teléfonos inteligentes, especialmente en los de alta gama. Y aunque en la gama media los fabricantes han aprendido la importancia de ofrecer amplias capacidades de memoria interna, 16 o incluso 32 GigaBytes siguen ofreciendo el riesgo de quedarse escasos a poco que hagamos un uso multimedia del móvil. En el caso de que nuestro móvil carezca de una ranura para expandir la memoria interna, en esta ocasión traemos tres soluciones para un móvil Android que no tiene microSD.

1.- Memoria externa por microUSB

Es algo más cara que una memoria externa convencional, pero la memoria externa por microUSB es una de las mejores soluciones para los móviles que carecen de microSD. Estas memorias, no mucho más grandes que una moneda, combinan una salida USB en un lado y una salida microUSB en el otro al mismo tiempo que ofrecen una determinada capacidad de almacenamiento. De alguna forma, son memorias externas que incorporan de serie todas las conectividades necesarias para conectarlas al móvil y al ordenador. Eso sí­, para que funcionen es necesario que nuestro teléfono inteligente sea compatible con la tecnologí­a de OTG (On-The-Go), así­ como también pueden requerir que dispongamos de la versión de Android 4.0 (o superior).

Si echamos un vistazo a los precios de las memorias externas por microUSB, veremos que un modelo de la marca Kingston con 32 GigaBytes de capacidad cuesta unos 16 euros, mientras que un modelo de 64 GigaBytes se puede comprar por 23 euros. Si lo comparamos con las tarjetas microSD de la misma marca, veremos que esas mismas capacidades están disponibles con precios de diez y 20 euros, respectivamente; una diferencia mí­nima, especialmente si tenemos en cuenta todos los quebraderos de cabeza que nos ahorramos con estos accesorios al no disponer de una ranura para tarjetas de memoria externa en el móvil.

2.- Adaptador de microSD para microUSB

Pero, si por algún motivo nos empeñamos en utilizar una tarjeta microSD en nuestro móvil, debemos saber que existe una forma de utilizar tarjetas microSD en un teléfono inteligente que carece de ranura para tarjetas de memoria externa. A través de un adaptador microSD-microUSB, cualquier teléfono inteligente puede conectarse a una tarjeta de memoria externa, permitiéndonos copiar y pegar archivos a la tarjeta tal y como si estuviera conectada en una ranura del propio móvil.

Estos adaptadores también son muy económicos, y por poco más de diez euros podemos encontrar incluso packs que incluyen una tarjeta de memoria externa junto al adaptador para conectarla a la entrada de corriente del móvil. En el caso de Kingston, una tarjeta microSD de 32 GigaBytes acompañada de su respectivo adaptador para la salida microUSB tiene un precio de poco más de doce euros.

3.- Cable USB OTG con una memoria USB

Por último, si lo que nos interesa es la alternativa más económica posible, la opción que mejor se adapta a nuestras necesidades es la de comprar un cable USB OTG conectado a una memoria USB. Estos cables están formados por una ranura para puertos USB en la que se conecta cualquier memoria externa USB (es decir, un pendrive), mientras que el otro extremo cuenta con una salida microUSB. De esta forma, lo que conseguimos es conectar cualquier memoria externa USB a nuestro teléfono inteligente, pudiendo así­ transferir archivos entre uno y otro dispositivo sin necesidad de pasar por el ordenador.

Estos adaptadores tienen precios que rondan los cinco euros (y, buscando con paciencia, es posible encontrar precios todaví­a más económicos), y lo único que deberemos comprar por separado -si no lo tenemos ya en casa- es la memoria externa.

BONUS.- Almacenamiento en la nube

Pero, para evitarnos pasar horas buscando formas de liberar la memoria interna de Android, lo más recomendable es dar el paso al almacenamiento en la nube. Existen muchos motivos para empezar a guardar tus fotografí­as en Internet, y uno de ellos reside en la enorme cantidad de espacio que se puede liberar de la memoria interna si todas las fotografí­as se almacenan en la nube. En Android, la plataforma de Google Fotos ofrece espacio gratuito para que los usuarios transfieran todas sus fotografí­as y ví­deos a la nube, permitiendo acceder después a esos archivos desde cualquier dispositivo asociado al usuario.