El Samsung Galaxy S7 ya es una realidad. Tras una infinidad de rumores y filtraciones, el pasado domingo día 21 de febrero Samsung presentó su nuevo buque insignia para el año 2016. Ahora que el nuevo smartphone de los coreanos ya es oficial, empiezan a llegar los primeros vídeos del desempaquetado del terminal. Uno de los primeros y, sin duda alguna, el más original, es el que ha realizado la empresa T-Mobile. Y es que han desempaquetado el Samsung Galaxy S7 debajo del agua. ¿Queréis verlo?.
Los vídeos de unboxing o desempaquetado de productos están de moda desde hace varios años. Los hay de todo tipo de productos, pero los más conocidos son los de productos tecnológicos. YouTube está lleno de vídeos de unboxing y, lo curioso, es que casi todos acumulan miles de visitas. Los smartphones de gama alta son uno de los productos de los que más vídeos de este tipo se realizan. Y si encima se trata de un terminal de referencia, como el Samsung Galaxy S7, todavía más.
Tras su presentación oficial, el nuevo Samsung Galaxy S7 ha comenzado a llegar a los medios y compañías de telecomunicaciones, así que ya podemos encontrar en la red los primeros vídeos del unboxing. Uno de los más trabajados que hemos visto lo ha realizado la compañía T-Mobile, presentando el terminal debajo del agua. Lo mejor es que lo veáis por vosotros mismos.
El vídeo es bastante curioso, a la par que gracioso. El presentador abre la caja del nuevo Samsung Galaxy S7, con cierta dificultad, para mostrarnos que podemos encontrar dentro de ella. No hay muchas novedades en este aspecto. Tenemos el terminal propiamente dicho, un pequeño manual de primeros pasos, los auriculares y el cargador de pared con su correspondiente cable micro USB. El protagonista incluso se permite el lujo de explicar un poco el diseño del terminal y algunas de sus características, con subtítulos claro.
En el vídeo vemos algo que sí es bastante importante. El presentador del vídeo enciende el Samsung Galaxy S7 estando debajo del agua, justo después de sacarlo de la caja. El terminal se enciende y además funciona perfectamente. Muestra la pantalla principal, ejecuta un vídeo e incluso hace una foto debajo del agua. Tras la foto, aparece en escena el Samsung Galaxy S7 Edge, el cual le lanzan desde fuera de la piscina. Como es lógico, el modelo curvado también funciona perfectamente debajo del agua.
Samsung ha insistido mucho en que la resistencia al agua de los nuevos terminales es sólo para salpicaduras o, por ejemplo, la lluvia. La compañía insiste en que no es un móvil que se pueda utilizar debajo del agua. Sin embargo, la calificación IP68 indica que el terminal se puede sumergir hasta un metro de profundidad durante un máximo de 30 minutos sin que sufra ninguna avería. No es que vayamos a hacer submarinismo con el terminal, pero es bueno saber que si se nos cae al váter (uno de los accidentes más comunes entre los usuarios de smartphones) no se estropeará.
El Samsung Galaxy S5 ya era resistente al agua, pero esta capacidad se retiró en el Samsung Galaxy S6. Los usuarios demandaban la vuelta de esta característica en el nuevo terminal y la compañía no ha defraudado. Samsung ha conseguido incluir la resistencia al agua sin modificar el diseño de su buque insignia. Todo un acierto.