La japonesa Sony coge carrerilla en esto de los dispositivos móviles. Mientras empieza a hacer cuenta de la caja que estaría registrando con los recientemente lanzados Sony Ericsson XPERIA Arc y Sony Ericsson XPERIA Play (que no son exactamente de Sony, sino de la empresa resultando del consorcio sueco-nipón encargado de hacer teléfonos), hemos sabido que ahora han puesto el ojo en los tablets. Y es que el jefe ejecutivo de la compañía, Howard Stringer, habría confesado a la publicación Bloomberg que la empresa se encuentra en estos momentos ultimando el desarrollo de un tablet que, si nada lo remedia, verá la luz a finales de verano de este mismo año.
Con el anuncio, Sony se convierte en la enésima compañía que se prepara para presentar batalla la carismático iPad 2 de Apple, la segunda batida de los de Cupertino en un segmento que ellos mismos se sacaron de la manga y que hasta ahora sólo han encontrado un rival en el Samsung Galaxy Tab (en cuanto a ventas con grandes cifras, ya que otros fabricantes como Viewsonic o Archos también han apostado por lanzar dispositivos de este tipo con Android).
Como no podía ser menos, Sony también confía en la plataforma desarrollada por Google pensando en tabletas. Así, Stringer admitió que el dispositivo de la casa equipará Android 3.0 Honeycomb. En este caso, los rumores al respecto del terminal de Sony se bifurcan en dos apuestas. Unos, los más realistas, señalan que la tableta de Sony equipará una pantalla de 9,4 pulgadas. Otros, los más visionarios, creen que la empresa apostará por aquel concepto que vimos hace una semanas, y que bajo el hipotético modelo «S2» definiría un cacharrito a medio camino entre un tablet con pantalla dual y un estuche.
En cualquier caso, lo que parece que sí pone de acuerdo a propios y extraños es que el tablet de Sony contará con la certificación PlayStation, al igual que el XPERIA Play, de modo que no sólo integre funciones de la consola de la compañía, sino que además podría ofrecer opciones de sincronización con la plataforma de videojuegos de Sony con la que se las gaste el usuario de la futura tableta de la compañía.
