Ya hace un tiempo que Apple se negó a reconocer las explosiones de unos iPod, cuyas fotos dieron la vuelta a Internet. Y con la problemática de la antena del iPhone 4 parece que los de Cupertino siguen con la misma tónica. Aunque un buen número de usuarios se ha unido a un gabinete legal en Estados Unidos para denunciar los hechos, Apple ha seguido en sus trece de no reconocer que el problema de la antena del iPhone 4 tiene que ver con un fallo garrafal de diseño. El caso es que días después de que el terminal se haya puesto a la venta, ha salido a la luz un problema y también un documento interno que da instrucciones a los empleados de Apple para resolver problemas de cobertura.
Al mismo tiempo, en la página oficial que nos lleva a las ofertas de trabajo de Apple, aparece desde el día 23 de junio de 2010, una oferta de trabajo que busca un ingeniero de antenas para iPad y iPhone. Una señal reveladora en este momento de crisis corporativa. De hecho, ¿quién podía predecir este problema? En la presentación del iPhone 4 que Steve Jobs realizó hace apenas unos días, avanzó que para esta ocasión, se había cubierto el teléfono con un marco de acero inoxidable que sin duda mejoraría la cobertura inalámbrica del dispositivo. Pero nada de esto se ha cumplido.
Muchos usuarios afirman que tan sólo al tocar el borde metálico del iPhone 4, pueden llegar a desaparecer las rayas de cobertura en un instante. A este problema de alcance mundial, Steve Jobs tan sólo ha querido añadir «que ese no es manera de coger un teléfono» y que los usuarios deberán ser cuidadosos para no cubrir la franja de acero inoxidable. Días después de habserse detectado el problema, se ha descubierto un documento en el que se dan las mismas instrucciones a los agentes de atención al cliente de Apple, quiénes también tendrán que animar al usuario a comprar una funda de caucho o goma, especialmente comercializada para la ocasión. Suena raro, ¿verdad?
Foto de: El Enigma