Ni HTC, ni Motorola ni Samsung: ninguna de esas compañías será la encargada de desarrollar el próximo móvil táctil de Google. La razón es sencilla: la compañía de Mountain View no tiene intención de volver a meterse en el berenjenal de sacar un nuevo terminal con la marca Google.
La experiencia del Nexus One debe haber sido traumática, y el haber mostrado unos resultados por debajo de las expectativas que se habían marcado para este móvil debe haber sido un varapalo para la aparición de un modelo Nexus Two. Así pues los posibles móviles que se barajaban como el próximo Google Phone pasarán a engrosar el listado de terminales con Android, pero no estarán lacrados con la marca que se dio a conocer a principios de año.
Desde Google no achacan la paralización del proyecto Nexus Two a los irregulares resultados del Nexus One. Sino todo lo contrario. Eric Schmidt, CEO de Google, apuntó que la empresa se metió en el terreno del hardware por el interés que suscitaba crear una plataforma nativa para Android. Una experiencia que, según el propio Schmidt, fue tan satisfactoria que no requiere continuar el legado con un Nexus Two.
Resulta tan extraño como un futbolista que debuta en Primera División y, tras meter un golazo de chilena, fruto de una espectacular acción individual en la que regatea hasta al utillero, pide el cambio y cuelga las botas, creyéndose satisfecho por haber hecho lo mejor que podía dar. Eso sí: en el caso del Nexus One, no ha habido ni regates, ni chilenas, ni siquiera un espectacular gol.
En cualquier caso, la cancelación de Nexus Two (si alguna vez fue un proyecto real) confirma que la fortuna de Google en el sector de los móviles no ha sido tan completo como ellos mismos esperaban.
De hecho, la idea inicial era que Nexus One sólo se pudiese adquirir desde la tienda online de la compañía, una opción que no hace mucho desecharon, confirmando que el camino recorrido por este dispositivo no estaba en la senda de lo que había planteado.