Si Apple no gana para disgustos, Microsoft le sigue detrás. El que iba a ser teléfono revelación entre los jóvenes adolescentes terminó por ser un fracaso llamado Kin One y Kin Two. Los de Redmond tan sólo han vendido 500 unidades del terminal y encima, han perdido la friolera de 240 millones de dólares. Se calcula que existen 10.000 terminales en el mercado, aunque parece que muy pocas han terminado en las manos del usuario. Aun así, Microsoft ha decidido impulsar una nueva actualización de software para un teléfono pensado para que los más jóvenes puedan estar permanentemente conectados a las redes sociales. Todo el gozo en un pozo.
El fracaso es evidente. Más aun cuando Microsoft se ha decidido a presentar los resultados del pasado trimestre. El balance, sin embargo, ha superado las previsiones de la compañía, que no esperaba en absoluto cerrar el trimestre con el mejor resultado de su historia. En total, Microsoft ha conseguido ingresar la friolera de 16,04 millones de dólares, unos 300 millones más que su eterna rival Apple. Los números rojos que se ha apuntado Microsoft tienen que ver con la cancelación del Kin One, la que ha costado 240 millones de dólares, sin contar todos los gastos que ha supuesto el desarrollo y la distribución del fallido terminal.
¿Y toda la culpa ha sido de Microsoft? Pues bien, los expertos dicen que no. De hecho, el teléfono se empezó a vender en territorio estadounidense mediante la operadora Verizon. El problema es que la operadora ofrecía un plan de consumo cercano a los 70 dólares mensuales, lo que serían 54 euros al cambio actual. Ésto hizo que el Kin fuera un teléfono poco asequible para los adolescentes y todo aquél que quisiera obtenerlo, de manera que Microsoft sólo pudo embolsarse unos 9.705 dólares por las ventas.
Los de Redmond han salvado el trimestre con creces, sobre todo gracias al éxito del sistema operativo Windows 7 y al lanzamiento de Microsoft Office 2010. No todo estaba tan perdido.
