Pantalla de 4,5 pulgadas, procesador de doble núcleo, sistema Windows Phone 8… son buenos argumentos para recomendar el Nokia Lumia 920. No obstante, ¿qué tal se porta este equipo cuando se trata de comprobar su resistencia? El lanzamiento de este equipo es inminente, y con vistas a dar respuesta a esta cuestión, la red empieza a poblarse con vídeos en los que se pone a prueba la entereza de este teléfono móvil en varias situaciones ””unas más disparatadas que otras, todo sea dicho. Empecemos echando un vistazo a cómo se ha portado el Nokia Lumia 920 ante los tests a los que se va visto sometido de la mano de los compañeros de PhoneBuff.
Para empezar, estos chicos exponen el Nokia Lumia 920 a la acción de una de las situaciones más devastadoras y catastróficas a las que puede enfrentarse un móvil: las manos de un bebé. Para empezar la prueba, veremos cómo un crío mordisquea y toquetea el Nokia Lumia 920 para acabar arrojándolo al suelo. Tras esto, la pantalla funciona perfectamente y el terminal prácticamente no atestigua el porrazo que acaba de llevarse contra el asfalto, más allá de una muesca en una de las esquinas.
La siguiente prueba sigue la línea de reproducir situaciones cotidianas que pueden amenazar la integridad del Nokia Lumia 920. En este caso, estamos charlando por teléfono y el teléfono se nos escurre de las manos. Como resultado, de nuevo, golpe contra el firme y taquicardia por el estado en que se presente el Nokia Lumia 920. Nos agachamos a recoger el móvil y comprobamos que, una vez más, el dispositivo ha resistido con templanza numantina el leñazo que se acaba de llevar. De nuevo, los daños son superficiales. Sólo unos desagradables arañazos y alguna muestra nueva en los márgenes laterales del equipo. Un feo añadido que rompe el limpio e inmaculado diseño del Nokia Lumia 920. No obstante, el funcionamiento sigue siendo impecable y la pantalla no ha sufrido daños.
La siguiente prueba de los amigos de PhoneBuff será un poco más inmisericorde. En esta ocasión, el Nokia Lumia 920 tendrá como compañeros de quirófano instrumentos tan espeluznantes como un manojo de llaves, un cuchillo e incluso una maza. Da miedo sólo pensar qué tipo de fiesta pueden montarse entre todos. Para empezar, las llaves se las ven con el terminal. Es normal que el Nokia Lumia 920 pueda compartir bolsillo, bolso o maleta con las llaves de casa, del coche o de cualquier otro lugar. En ese caso, podríamos temer la aparición de arañazos. Pero según muestra esta prueba, el Nokia Lumia 920 saldría airoso del meneo.
¿Correría la misma suerte si confundimos el Nokia Lumia 920 con una cebolla que quisiéramos cortar en juliana? Este es un escenario que, por fortuna para el diagnóstico psicológico de los chicos de Nokia, parece no haber sido contemplado. Cuando sometemos el teléfono a una serie de golpes con la afilada hoja de un cuchillo de cocina, acabamos generando una serie de marcas que evidencian la carnicería. Visto así, es un buen aunque obvio consejo el mantener el Nokia Lumia 920 alejado de las hojas cortantes.
El paroxismo en la prueba llega cuando los muchachos de PhoneBuff empuñan el martillo como operario de fragua y se disponen a castigar el Nokia Lumia 920 como si no hubiese un mañana. Comienzan con una serie de golpes en la pantalla, cada uno más intenso que en anterior. La primera sesión de porrazos no causa daños en el equipo, que carece de heridas tras el maltrato y presenta un funcionamiento correcto. Pero todavía no ha terminado el peculiar tormento del gama alta de Nokia. Es momento entonces de usar el dispositivo, ahora, como martillo, de modo que la prueba pasará a consistir en la improbable posibilidad de que empleemos el Nokia Lumia 920 para fijar un clavo en un trozo de madera golpeando desde el lado de la pantalla. Como suena.
¿Cómo se comporta entonces el Nokia Lumia 920 ante esta salvajada? Pues por difícil que sea creerlo, sorprendentemente bien. La pantalla permanece indemne a la disparatada prueba. La pequeña pieza de metal está clavada en la madera y la pantalla del Nokia Lumia 920 no muestra daños ni un funcionamiento erróneo. No obstante, si estás pensando en hacerte con este equipo y tienes pensado hacer alguna obrita de bricolaje, date una vuelta por la ferretería en lugar de recurrir a tu Nokia Lumia 920 para estas tareas. No conviene arriesgarse.
te acodas de los antiguos ladrillos de nokia o los ‘raspahielos’ como decimos en venezuela por lo resistentes que eran estos equipos bueno el lumia 920 es un raspahielo pero con mas estilo
La pantalla si es resistente aunque del clavo si quedó señal y eso que no dió con la fuerza que tocaba, golpeaba con miedo, pero en la carcasa de plástico de cada caida se ha quedado una marca no se rompe ni se desarma pero, de cada prueba han quedado marcas. Mi N8 ha sufrido caidas similares y no tiene ninguna marca tras dos años de uso, además hace mucho tiempo adquirí la práctica costumbre de reservar un bolsillo solo para el móvil y papeles. Otra cuestión es el martillo, además de que los golpes eran flojos es una maza de GOMA que prueben con uno de hierro a ver que pasa. Me gusta mucho el 920 pero está claro que hay que cuidarlo