A la altura de los tope de gama, la surcoreana Samsung ha presumido de un 2012 muy completo en ventas. Pero los fabricantes saben que es en la gama media donde se cocinan los márgenes más generosos a la hora de hacerse con importantes porciones de cuota de mercado. En este sentido, no es de extrañar que la firma asiática dé a entender que sus planes para la inminente feria de móviles de Barcelona, el Mobile World Congress 2013, pasan por centrarse en mostrar una nutrida familia de terminales de entrada y gama media, con vistas a constituir una sólida oferta para el mercado mayoritario.
Siguiendo esta línea, el Samsung Galaxy Star podría ser uno de los equipos más asequibles de cuantos veremos durante la primera mitad del año funcionando directamente con Android 4.1 Jelly Bean. A través de SamMobile hemos sabido que este equipo, codificado como GT-S5282, sería uno de los inquilinos del expositor que la compañía surcoreana tendrá en el evento que comienza el próximo lunes 25 de febrero. Aunque por el momento no se ha expresado el precio que alcanzaría este dispositivo, echando un vistazo a las prestaciones de las que ya se empieza a hablar, se invita a pensar que el usuario no tendría que hacer grandes esfuerzos por llevarse este equipo sin ataduras a uno u otro operador.
Entre estas prestaciones, habrían quedado al descubierto una pequeña pantalla de tres pulgadas. La resolución no sería especialmente alta, aunque más que suficiente, llevando al estándar QVGA, o lo que es lo mismo, de 320 x 240 píxeles. Las conexiones resultarían más que eficaces, presentando Wi-Fi, 3G, A-GPS, microUSB y Bluetooth 4.0. No hay noticias por el momento de un posible sensor NFC, aunque si atendemos a los últimos lanzamientos de este fabricante para este tipo de equipos, no sería arriesgado pensar en el lanzamiento de dos versiones: una con el sensor de comunicación por proximidad y otra sin él.
Se habría sabido también sobre este Samsung Galaxy Star que instalaría, al menos, una cámara. Ésta, sin embargo, se quedaría en una resolución máxima para fotografías de dos megapíxeles. Precisamente aquí reside uno de los indicios más sólidos para pensar que este equipo tendría un precio razonablemente bajo. Por otro lado, se desconoce qué tipo de procesador instalaría, aunque es posible que llegue a un tope de un GHz. Para llegar a esta estimación, basta con saber que desde SamMobile apuntan que la batería que incluye de serie el Samsung Galaxy Star es de 1.200 miliamperios.
Otros detalles de interés sobre el Samsung Galaxy Star son la memoria y el diseño. Respecto a lo primero, encontraríamos un fondo de almacenaje integrado de cuatro GB, ampliable mediante la instalación de una tarjeta microSD de hasta 32 GB. En cuanto a lo segundo, desde la citada web apuntan a un dato que le resultará familiar a los más nostalgicos: el Samsung Galaxy Star vendrá, por el momento, en una versión con color Scarlet Black. Esta tonalidad ha sido una insignia durante un largo periodo en los dispositivos de Samsung, marcándose como emblema en televisores, cámaras, reproductores e incluso móviles. La recuperación de este color en esta etapa dorada como fabricante de teléfonos, estaría, por tanto, cargada de significado.
¿Jelly Bean para una pantalla tan malucha? No me lo creo, sinceramente. ¿Y una cámara de 2 mp? Imposible. No creo que lleve ni ICS.