La empresa coreana Samsung quiere que tu teléfono móvil sea mucho más que un móvil: un aparato capaz de ayudarte a medir determinados valores relacionados con tu salud. Está por ver si la tecnología al alcance de todos es la mejor aliada en temas de salud, pero Samsung ha decidido patentar un sistema parecido al láser que te permitiría conocer datos claves de tu estado actual. ¿Quieres saber como funcionaría?
Instrumentos de medición de tu salud, al alcance de tu mano gracias a tu smartphone
Esta semana se ha dado a conocer una solicitud de patente realizada por Samsung el pasado mes de septiembre ante la Oficina Estadounidense de Patentes y Marcas (U.S. Patent & Trademark Office), con una serie de sistemas que permitirían a sus dispositivos móviles medir variables como el pulso, la frecuencia cardiaca, la presión sanguínea, el flujo sanguíneo y hasta las condiciones de la piel del usuario. El método utilizado sería un “láser de interferometría”, y ahora falta esperar que la Oficina de Patentes y Marcas complete el proceso de aprobación, que puede durar meses.
Samsung podría utilizar este sistema para implementarlo en sus dispositivos móviles, tanto smartphones como tabletas, además de los Galaxy Gear.
La solicitud de la patente muestra un sistema para dispositivos móviles compuesto por un láser de interferometría, un detector y otras unidades de memoria y procesamiento de la información. También se contempla la posibilidad de incluir una pequeña pantalla que muestre el pulso o la presión sanguínea.
El sistema también podría incluir un altavoz para reproducir sonido (por ejemplo, señales sonoras para indicar la frecuencia cardíaca), o bien mensajes de voz para informar sobre el estado de lo que estemos midiendo. Y, por supuesto, también contará con algún conector para transmitir la información a otros dispositivos, con o sin cable.
En el documento de solicitud, Samsung explica el funcionamiento del sistema que quiere patentar: el láser impacta en la piel del usuario (por ejemplo, “escaneando” la mano con el móvil, o por contacto directo con la piel en el caso de los wearables), y al choque con esta el sensor interpreta los patrones de la señal. Las pulsaciones en las arterias provocan un movimiento de la piel determinado, pero para poder identificar esos pequeños matices será necesario trabajar con un nivel de precisión muy elevado, que tenga en cuenta las pequeñas alteraciones que se producen por la distancia entre el aparato y la piel.
Probablemente, una de las aplicaciones más interesantes sean los wearables, ya que cada vez más personas están interesadas en conocer y monitorizar detalles de su actividad diaria, y muchos dispositivos empleados por deportistas permiten registrar la frecuencia cardiaca en tiempo real para medir la eficacia de los entrenamientos.
También podría ayudar a personas con determinadas condiciones a identificar prematuramente episodios de crisis o problemas (taquicardias, aumento de la presión sanguínea, etc.) y tomar conciencia de la necesidad de acudir a un médico.