Tal y como apuntaban los rumores, Apple ha vuelto a la vieja escuela al presentar su nuevo iPhone SE. Y es que parece que los antiguos terminales con solo 4 pulgadas de pantalla resultaban cómodos y lo suficientemente grandes para una gran cantidad de usuarios. Así, tras solo seis meses desde la última presentación, ahora dan a conocer un nuevo modelo, con un diseño poco rompedor, pero con importantes prestaciones técnicas en su interior. ¿Es el viejo iPhone 5s? No, pero se le parece mucho.
Lo que primero llama la atención de este iPhone SE es su diseño, que no resulta del todo nuevo. De hecho, con un solo golpe de vista parece que nos encontramos ante el mencionado iPhone 5s. Las diferencias en este aspecto residen en los bordes y laterales, que ahora son mates, y en el nuevo color añadido a la colección. Así, junto al gris espacial, el plateado y el dorado, ahora se añade el oro rosa. Cualidades que no sorprenden demasiado, y que dejan lo importante en el interior.
Así, bajo este renovado capó, el iPhone SE presenta novedades como un chip NFC, que permite el uso del servicio Apple Pay, con el pagar con sólo acercar el móvil al datáfono adaptado para ello. Además, su procesador será un A9, que irá acompañado de un co-procesador de movimiento M9, centrado en los sensores. Algo que se traduce en una potencia muy similar a lo visto en el iPhone 6s, además de posibilitar la conexión a redes LTE (conversaciones sobre LTE incluidas) de alta velocidad de Internet un 50 por ciento más rápido que generaciones anteriores. Cuestiones que dejan muy atrás al iPhone 5s con el que tantas similitudes guarda por fuera.
Sus cámaras fotográficas también han sido adaptadas a los nuevos tiempos. Esto significa contar con sensor de 12 megapíxeles en su cámara iSight capaz de capturar vídeo a resolución 4K (3.840 x 2.160 píxeles) y acompañado por un flash tipo LED true-tone (corrección de color). Si se reduce esta calidad hasta el estándar Full HD o 1080 píxeles, podrá capturar vídeo a 60 fotogramas por segundo, además de poder hacer grabaciones en slow motion o a cámara lenta a 240 cuadros por segundo. También es capaz de capturar panorámicas de 64 megapíxeles, repletas de detalle. Es decir, igual que el iPhone 6s. En cuanto a su cámara frontal, contará con el Flash Retina, capaz de iluminar la pantalla según las condiciones del entorno para conseguir un efecto flash equilibrado al tomar selfies.
Algo más controvertido es el asunto de las Live Photos, esas imágenes que graban unos segundos de vídeos para crear un formato más dinámico y sorprendente. Y es que estas imágenes estarán disponibles también en el iPhone SE, pero no se reproducirán mediante una pulsación fuerte, sino mediante una pulsación larga, ya que la pantalla de este terminal no incluye la tecnología 3D Touch, la gran ausente en este terminal.
Sí integra, sin embargo, la tecnología de protección Touch ID, es decir, su botón con lector de huellas dactilares. Algo realmente útil para desbloquear el dispositivo y para confirmar pagos o transacciones con la identidad del usuario, pero que también se extiende a las nuevas notas protegidas por esta seguridad. Parte de estas ventajas llegan de la mano de iOS 9.3, la nueva versión del sistema operativo que también ha sido presentada junto al terminal, y en la que se incluye un modo nocturno que regula el brillo y los colores para evitar ser deslumbrados por la pantalla en la oscuridad, las nuevas sugerencias de salud para mantenernos en forma, o las opciones para personalizar la herramienta de noticias News. Claro que, algunas de estas aplicaciones y servicios aún tienen que desembarcar en España.
De momento no se saben las horas totales de autonomía de este nuevo terminal de Apple, aunque durante su presentación se ha confirmado la mejora de esta cuestión, alargando su vida útil respecto a otros iPhone. También cuenta con el asistente Siri siempre activo, dispuesto a responder a las órdenes del usuario tras dictar el comando “Oye Siri”. Cierra su apartado técnico los nuevos micrófonos incorporados para mejorar el sonido de las llamadas de este iPhone SE, la posibilidad de realizar llamadas a través de la conexión WiFi o la incorporación del Bluetooth de tipo 4.2 a su apartado de conectividad.
En definitiva, un nuevo iPhone que se presenta con el aspecto del iPhone 5s, con una pantalla de 4 pulgadas de diagonal, pero con un interior potente y actualizado. Todo ello por un precio de 490 euros en el modelo de 16 GB de almacenamiento, y de, posiblemente, 590 euros en el caso del iPhone SE de 32 GB. También hay que decir que, con la llegada de este iPhone SE, el iPhone 5s quedará descatalogado y dejará de venderse, como viene siendo habitual. El iPhone SE comenzará a ser vendido el 31 de marzo en Estados Unidos, y llegará a España en el mes de abril.