Diferencias entre una pantalla del móvil IPS, AMOLED o Super AMOLED

Cuando hablamos de las especificaciones técnicas de un móvil una de las primeras cosas en las que nos fijamos es la pantalla. Aunque nos fijamos más en la resolución, el tipo de panel también es importante. Seguro que habéis visto más de una vez las siglas IPS o AMOLED. Pero, ¿qué significan realmente estas siglas? ¿Afectan al uso diario del móvil? En ocasiones es complicado saber qué tipo de pantalla es mejor. Y más cuando los fabricantes suelen variar las tecnologí­as y ponerles ‘nombres raros’. Por ello vamos a ver qué tipo de pantallas encontramos en los móviles actuales y qué diferencias hay entre ellas.

LCD

Si creáramos una tabla y en ella comparáramos las caracterí­sticas técnicas de 6 o 7 móviles, verí­amos siglas como IPS, LCD, AMOLED, Super AMOLED, Retina y puede que alguna más. Es lo mismo que ocurre con los televisores, entre los nombres comerciales y las distintas variaciones de una tecnologí­a podemos acabar completamente liados. Sin embargo, en realidad, solo existen dos tipos de paneles para las pantallas de los móviles: LCD y OLED.

Los paneles LCD (Liquid Crystal Display) son los más habituales en los dispositivos móviles. Aún así­, es raro ver que en las caracterí­sticas de un móvil nos pongan ‘pantalla LCD’. Y es que dentro de los paneles LCD tenemos múltiples variantes con diversos nombres.

TFT LCD

Los paneles TFT (Thin Film Transistor) fueron durante muchos años el tipo de LCD más utilizado para las pantallas de los móviles. Todaví­a hoy se pueden ver en algunos terminales de gama muy baja, aunque han caí­do en desuso.

En la tecnologí­a TFT, cada pí­xel es un pequeño condensador. Esto permite unos tiempos de respuesta muy rápidos, con un contraste aceptable. Además, la fabricación de este tipo de paneles es muy económica.

Sin embargo, tienen un gran problema para utilizarlos en los móviles. Y es que su consumo energético es muy alto. Antes se podí­an utilizar porque las pantallas eran muy pequeñas, pero una pantalla de más de 5 pulgadas con esta tecnologí­a serí­a inviable.

IPS LCD

La tecnologí­a IPS es la que encontramos actualmente en la gran mayorí­a de móviles. IPS (In-Plane Switching) se desarrolló para mejorar los ángulos de visión y la reproducción de color de los paneles TFT. Pero lo que realmente hizo que la industria del móvil se decantase por estos paneles fue la drástica reducción del consumo energético.

Es decir, los paneles IPS ofrecen:

• Consumo energético reducido respecto al TFT
• Imágenes ní­tidas
• Colores consistentes
• Buenos niveles de brillo y contraste
• Amplios ángulos de visión

Por todos estos motivos los paneles IPS son los más extendidos en la industria móvil. Los encontramos en todo tipo de móviles, incluidos los de gama alta como el Huawei P10 Plus.

Seguramente alguna vez hayáis escuchado lo de «pantalla Retina». Pues bien, esto no es más que un panel LCD IPS con una densidad de pí­xeles superior. Al aumentar la densidad de pí­xeles (lo que comúnmente vemos como «ppp»)  las imágenes se ven más ní­tidas y mejor definidas.

¿Cómo se consigue aumentar la densidad de pí­xeles? Utilizando una resolución mayor. Por ejemplo, el iPhone 7 tiene una pantalla de 4,7 pulgadas. Con este tamaño de pantalla lo normal hubiera sido utilizar una resolución HD de 1.280 x 720 pí­xeles. Sin embargo, el móvil de Apple tiene una resolución de 1.334 x 750 pí­xeles. Con estos datos su densidad de pantalla es de 326 ppp. Es decir, superior a la de la mayorí­a de terminales con esta diagonal.

Por supuesto también entran en juego otros factores para que parezca que las pantallas de Apple ‘se ven mejor’, como el brillo o el contraste.

OLED

Al principio comentábamos que solo existen dos tipos paneles para las pantallas de los móviles: LCD y OLED. OLED (Organic Light-Emitting Diode) es una tecnologí­a autoluminiscente, basada en semiconductores compuestos por carbono. Es decir, cada subpí­xel emite su propia luz sin necesidad de filtros o retroiluminación. Esto significa que cada pí­xel se ilumina o brilla por sí­ solo.

Entre las ventajas que aporta la tecnologí­a OLED a las pantallas de los móviles tenemos:

• Mayor eficiencia energética. Esto se debe a que no necesitan energí­a para reproducir el color negro, simplemente apagan ese pí­xel.
• Negros más profundos
• Mayor nivel de contraste
• Mejores ángulos de visión

Sin embargo, es muy raro ver un móvil con panel OLED. Lo más habitual es encontrarnos con alguna de sus variantes: AMOLED y Super AMOLED.

Las pantallas AMOLED (Active Matrix Organic Light-Emitting Diode) mejoran el consumo energético, muestran imágenes más claras y tienen un mayor contraste y brillo. Sin embargo, su mayor inconveniente es que en ocasiones pueden mostrar colores sobresaturados. Por ejemplo, el ZTE Axon 7 incluye una pantalla AMOLED.

Samsung evolucionó estos paneles para crear los Super AMOLED. Estos permiten una mayor densidad de pí­xeles, lo que deriva en una imagen más ní­tida y definida. También mejoran el contraste y el brillo, mostrando una imagen clara incluso a pleno sol. Además permite reducir el grosor de los paneles. Y, por supuesto, reducen todaví­a más el consumo de energí­a, algo clave para un terminal móvil.

Actualmente casi todos los móviles de Samsung cuenta con pantalla Super AMOLED, como el Samsung Galaxy S7 o el Samsung Galaxy A5 2017.

Otra variante de los paneles OLED son los nuevos paneles flexibles. Conocidos como POLED (plastic OLED) permiten crear pantallas curvadas, como la que vemos en el Samsung Galaxy S8+.

¿Cuál es la mejor pantalla?

A pesar de toda la información que hemos ido viendo, es difí­cil contestar a esa pregunta. Según DisplayMate, la mejor pantalla móvil de este año es la del Samsung Galaxy S8. Sin embargo, como decí­amos antes, habrá usuarios a los que les parezca que la tecnologí­a Super AMOLED satura demasiado los colores.

En este caso lo mejor es comprobar por nosotros mismo qué pantalla nos gusta más. Como ejemplo tenemos la pantalla del Huawei P10, que con un panel IPS Full HD consigue unos resultados excelentes. Todo es cuestión de gustos.