Te levantas de la siesta, ves un nuevo mensaje de WhatsApp de un número de teléfono internacional que te pregunta “Hola” u “Hola, cómo estás hoy” de una tal Judy Duncan o Sarah y te planteas si estás despierto o todo esto es un sueño. Es el nuevo intento de estafa que está sufriendo miles de usuarios a lo largo del país, entre los que me encuentro, junto con mi compañero David G. Mateo. La cuestión es, ¿qué se encuentra realmente tras este tipo de mensajes, enviados a través de prefijos como el +62, +91, +39 o similares? Lo vemos a continuación.
El carácter de este artículo es meramente informativo. tuexperto.com solo se limita a recopilar testimonios de usuarios encontrados en páginas de terceros, por lo que se desmarca de las opiniones expuestas por estos, así como de las acusaciones lanzadas a la empresa en torno a sus servicios de red y/o el servicio posventa.
La estafa tras los mensajes de prefijos como el +62, +39 y +91
Desde hace unas pocas semanas, cientos de usuarios se han sumado a denunciar en las redes sociales haber recibido mensajes extraños que empiezan con un simple “Hola”, “Qué tal” o “Hola, como estás hoy”. Lo que en principio parece una simple confusión, se trataría de un intento de estafa en toda regla con un único objetivo: hacerse con tu dinero.
Nuestro compañero Mateo decidió tirar del hilo para averiguar qué se encontraba tras estos intentos de comunicación fraudulentos. Sarah, la protagonista de estos mensajes, nos propone una oferta de empleo difícilmente rechazable en la que tan solo tendremos que dar ‘Me gustas’ a vídeos de YouTube e interactuar con publicaciones de diversas plataformas, como Instagram, TikTok o la ya mencionada YouTube. Así sigue la conversación:
El hilo de la conversación vendría a resumirse en lo siguiente:
¡Hola! Esta es Sarah de Sancel Group Recruitment Company. Actualmente tenemos nuevas oportunidades de empleo a tiempo parcial y tiempo completo. ¿Está bien si comparto más detalles contigo?
Simplemente le escribo para anunciar las oportunidades de trabajo remoto e independiente de nuestra empresa. Le ahorra tiempo y, lo más importante, no interfiere con su trabajo actual de tiempo completo. No hay limitaciones de tiempo, por lo que puedes trabajar cuando quieras. ¿Estás interesado en conocer más detalles?
Es un trabajo muy simple y fácil. Tu función es dar me gusta y seguir páginas en YouTube y enviarnos una captura de pantalla. Recibirá su pago dentro de los 20 minutos posteriores a la finalización.
Cuando se nos proporcionan más detalles de dicha oferta, sale a relucir el método empleado para perpetrar la presunta estafa: una plataforma de dudosa procedencia que registra nuestra actividad para ser recompensada posteriormente. El problema es que para extraer el saldo acumulado debemos indicar una serie de datos de pago. Y adivina qué tipo de información es requerida para realizar el ingreso… Exacto, nuestras tarjetas de crédito y cuentas bancarias.
A partir de este punto, lo que pueda suceder dependerá del estafador en cuestión. Contrataciones no autorizadas, movimientos de efectivo entre cuentas para blanqueo de capitales, compras en tiendas internacionales y un largo etcétera. En algunos casos, incluso se llegan a realizar llamadas y envío de SMS a través del sistema de mensajería RCS de Android y iPhone. Por esta razón, lo más sensato es proceder a su bloqueo, como la propia aplicación de WhatsApp nos sugiere.