El iPhone barato hizo su aparición. Y no es barato. Nada menos que 600 euros podría costar la renovación del iPhone 5, un movimiento con el que Apple ha roto todas las previsiones. Y es que el iPhone 5C pasa a sustituir al iPhone 5 en el catálogo de la compañía, limitándose a recortar la calidad de los materiales e incorporando una sola mejora sustancial: una mayor compatibilidad en bandas destinadas a redes de cuarta generación LTE. Más allá de eso, el iPhone 5C se limita a cambiar el aplaudido aluminio de su predecesor para apostar por plástico de policarbonato, un material que por cierto era objeto de las mofas y críticas de los defensores del teléfono de la manzana.
Una de las ligeras mejoras, quizás la única que detectarían los usuarios en nuestro país, está en la autonomía. Para ilustrar esto, basta acudir a los índices oficiales señalados por el fabricante. El iPhone 5C lograría una duración en uso 3G de diez horas frente a las ocho horas del iPhone 5. Igualmente, en reposo el nuevo teléfono logra 250 horas de autonomía, 25 más que el que está llamado a ser oficialmente descatalogado. En navegación web y reproducción multimedia, persisten los mismos valores.
Las diferencias entre los dos continúan, pero en detrimento del iPhone 5C. El nuevo smartphone de Apple aumenta en dimensiones y peso, registrando un grosor de nueve milímetros, frente a los envidiables 7,6 milímetros del iPhone 5. Igualmente, el iPhone 5C pesa más, marcando 132 gramos en la báscula, 20 gramos más que su predecesor. La culpa del grosor está sin duda en la nueva cubierta. Y quizás este detalle también está involucrado en el peso, aunque la presencia de una batería sensiblemente más potente también es un sospechoso en este sentido.
Las distancias se marcan igualmente en las versiones disponibles. Aunque según carcasa el iPhone 5C amplía la oferta ””por los colores blanco, rosa, amarillo, azul y verde, frente a los dos iPhone en negro y plateado””, en lo relativo a las ediciones por memoria se presenta un recorte. Quizás menor. O no. Porque los usuarios que quisieran un iPhone 5 de 64 GB podían optar a esta posibilidad, cosa que queda radicalmente suprimida con el iPhone 5C, que sólo está disponible en 16 y 32 GB de almacenamiento integrado.
Y hasta aquí los elementos que distinguen a uno y otro. Por lo demás, como ya hemos adelantado, todo igual. La misma pantalla de cuatro pulgadas con resolución Retina (1.136 x 640 píxeles), la misma cámara de ocho megapíxeles con opción de captura de vídeo con calidad máxima FullHD y el mismo perfil de conexiones ””con la excepción de la aludida ampliación en las bandas LTE””, con lo que nos topamos con compatibilidad Wi-Fi, 3G, Bluetooth, GPS y el conector nativo Lightning. El procesador tampoco cambia: es la misma unidad A6 de doble núcleo, que mantienen distancias con el nuevo A7 de 64 bit que encontramos en el iPhone 5S.
Un último detalle: el iPhone 5C es más barato que el iPhone 5. O al menos, más barato de lo es ahora este equipo. Una diferencia de apenas 100 euros por un equipo cuya relación-calidad precio se aleja muy notablemente de lo que se considera un smartphone de gama media.
Esta keynote fue algo decepcionante . No puede ser que muestren el 5c como algo economico . Si sale carisimo de todos modos . Y el 5s tiene apenas unas cuantas funciones nuevas a diferencia de el 5 . Y ya lo quieren mostrar como una gran inovacion . Por dios los de Apple les deveria dar verguenza . No son ni la sombra de lo que eran antes .