Malos tiempos para Sony. No parece irle nada bien a la marca japonesa en cuanto a su departamento de telefonía móvil, al punto de que podríamos estar asistiendo a sus últimos coletazos. Así lo asegura el medio informativo de tecnología The Verge en el que podemos leer datos realmente catastróficos. Aseguran que los beneficios de Sony Mobile, según los últimos informes económicos de la marca, se han reducido a la mitad en el último año, y eso que ya no eran demasiado halagüeños.
Los informes económicos auguran la peor de las noticias
En el trimestre que acaba justo en el mes de julio de 2018, prosigue el informe, Sony ha logrado vender 2 millones de dispositivos móviles. El año pasado, en el mismo periodo del año, alcanzaban casi los 3 millones y medio de equipos, un descenso claramente notable con respecto a una cifra, repetimos, que no podía sostener a todo un departamento. Para que el lector tenga una idea en perspectiva de las cifras que manejan las marcas todopoderosas del mercado, como por ejemplo la coreana Samsung, su último terminal por el momento, el Samsung Galaxy S9, vendió en un solo mes, desde su lanzamiento en tiendas, 8 millones de unidades. Esto supone 6 millones más de terminales en un solo mes, mientras que pasaron 3 meses para la firma japonesa.
Seguimos con los apuntes catastrofistas que no auguran nada bueno para la marca. En el año contable de 2017, Sony vendía 13 millones y medio de teléfonos (repetimos, Samsung en solo un mes vendía la mitad de uno de sus modelos del catálogo) y en abril se estimaban las ventas para este año en 10 millones de teléfonos vendidos. Actualmente se han vuelto a revisar las cuentas para arrojar resultados más realistas y ahora se ponen en 9 millones de móviles. La previsión de beneficios para todo el ejercicio fiscal de 2018, teniendo en cuenta el ritmo de ventas, sería de casi 5.500 millones de dólares. Ello supone que solo otra marca como HTC le podría arrebatar el puesto de proveedor de teléfonos móviles menos relevante del mercado global.
La marca de Sony en términos generales no tiene nada que temer, auspiciada por la buena salud de PlayStation. Su departamento de teléfonos móviles es otro cantar. ¿Cuánto durarán hasta que den el cerrojazo definitivo? ¿Les ocurrirá como a Nokia? Seguiremos informando
