La fragmentación de Android pasa factura a los móviles. Si bien ya hay más de un usuario que se lamenta por no saber cuándo puede actualizar su Samsung Galaxy S sujeto a una operadora, los próximos en decepcionarse será los que se hagan con un Motorola Defy. El smartphone todoterreno del fabricante norteamericano se estrena con la versión Eclair (Android 2.1) del sistema, y no parece que vaya a darse mucha prisa en ponerse al día con la plataforma.
Según ha informado Eurodroid a partir de un comunicado de Motorola, el Motorola Defy no podría estar listo para actualizarse a Android 2.2 Froyo antes del segundo trimestre de 2011, lo cual siendo prudentes derrama una lectura que señala, en el peor de los caso, al próximo mes de junio como plazo límite para que los usuarios de este móvil resistente a golpes, agua y caídas puedan hacerse con la última versión de la plataforma de Google para móviles.
El Motorola Defy es un móvil que, como decimos, cuenta con la peculiaridad de ser uno de esos terminales llamado “rugerizados”, que no es otra cosa que un móvil que dispone de unos medios de protección especialmente pensados para salir indemne de algunas situaciones.
Así, el Motorola Defy podría soportar temperaturas muy por encima y debajo de los límites en los que otros dispositivos acabarían escacharrados, además de resistir a caídas, accidentes o acciones directas con agua o arena.
Actualmente, es posible conseguir este dispositivo por unos 350 euros con el terminal liberado y usarlo con cualquier operador. O también podríamos optar por adquirirlo subvencionado por Vodafone, que incorpora este Motorola Defy en su catálogo de móviles que tras firmar unas serie de condiciones podrían ser nuestro sin pagar un euro.