Ahora que por fin Samsung ha confirmado los rumores, ya podemos contar que hemos tenido un pequeño affair con el Samsung Galaxy Note 8. Y es que la compañía nos lo mostró días antes de su presentación oficial en Nueva York en una rápida visita a Londres. Fue poco más de una hora, pero el contacto directo con el terminal nos permitió tomar unas buenas primeras impresiones. De ellas nos quedamos con cinco puntos clave que dominan sobre todo el conjunto del tabletófono de Samsung.
Ya sabrás que se trata de un dispositivo que repite y mejora la fórmula del Samsung Galaxy S8+. Eso sí, con ciertas variaciones. Su tamaño es mayor, ya que incluye una pantalla infinita de 6,3 pulgadas que solo tiene bordes arriba y abajo. Además, dentro de su cuerpo alberga el S Pen, el lápiz vitaminado de Samsung. Quizá su ficha técnica no sorprenda, pero este terminal ya cuenta con doble cámara. Algo que da pie a tomar fotografías amplias y captar detalles alejados. Y también el famoso efecto bokeh de fondos desenfocados que Apple se ha encargado de popularizar.
Características técnicas del Samsung Galaxy Note 8
Pantalla | 6,3 pulgadas, QHD+ (2960 x 1440) (521ppi) | |
Cámara principal | – Gran angular de 12 megapíxeles, f/1.7 (Estabilizador) – Teleobjetivo de 12 megapíxeles, f/2.4 (Estabilizador) |
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Cámara para selfies | 8 megapíxeles, f/1.7, autoenfoque, vídeo Full HD | |
Memoria interna | 64 GB | |
Ampliación | microSD de hasta 256 GB | |
Procesador y memoria RAM | Exynos 8895 de Ocho núcleos (2.3GHz Quad + 1.7GHz Quad), 64 bit, 10 nanómetros | |
Batería | 3.300 mAh, carga rápida, carga inalámbrica rápida | |
Sistema operativo | Android 7.7.1 Nougat / Samsung Touchwiz | |
Conexiones y sensores | BT, GPS, USB de tipo C, NFC, Acelerómetro, Barómetro, Sensor de huella dactilar, Sensor de giro, Sensor geomagnético, Sensor Hall, Sensor de pulso cardíaco, Sensor de proximidad, Sensor de luz RGB, Sensor de iris, Sensor de presión |
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SIM | nanoSIM | |
Diseño | Metal y cristal, certificado IP68, incluido S Pen | |
Dimensiones | 162,5 x 74,8 x 8,6 milímetros (195 gramos) S Pen: 5,8 x 4,2 x 108,3 mm (28 gramos) |
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Funciones destacadas | S Pen (dibujar GIF, traducir frases, tomar notas sin límite en la pantalla apagada…), compatibilidad con Samsung Dex actualizado, efecto bokeh en fotos | |
Fecha de lanzamiento | Desconocido (ya en pre-compra) | |
Precio | 1.010 euros |
Y no. Este terminal no va a prender en llamas. Ha reducido su batería respecto al Galaxy S8+ a pesar de contar con mayor tamaño. Se queda con 3.300 mAh, pero con tecnología de carga rápida y de carga inalámbrica rápida. Así que quedarse sin batería en mitad de la jornada no debería ser ningún problema. Basta con unos cuantos minutos conectado para disfrutar de más horas de autonomía.
Pero vamos a lo que vamos. ¿Qué es lo que realmente nos ha gustado de este Samsung Galaxy Note 8? Pues estos cinco puntos:
S Pen vitaminado
No es realmente nuevo per se, pero este utensilio crece en posibilidades en el Samsung Galaxy Note 8. Tanto enfocado a la productividad, como al ocio y a la diversión. Nuevas características que se suman al S Pen que ya pudimos disfrutar con la tableta Samsung Galaxy Tab S3. Y es que mantiene su punta de 0,7 milímetros de grosor, que lo hace realmente preciso sobre la pantalla. Además, continúa midiendo más de 4.000 niveles de presión. Esto hace que, con la aplicación de dibujo, lettering o escritura adecuada, reconozca el trazo del usuario como si de bolígrafo y papel real se tratase.
Pero, como decimos, lo más importante es lo que añade a esto que conocíamos. Por un lado su diseño permite ser introducido en el cuerpo del Samsung Galaxy Note 8 en cualquier posición (siempre por la punta) sin que quede atascado. Y tiene certificación IP 68, así que resiste al polvo y al agua. Por otro lado están las novedades en diferentes aplicaciones. Lo que más nos ha gustado es la posibilidad de escribir o incluso dibujar GIF. Es decir, crear una animación con una frase o un diseño sencillo que después se comparte a través de aplicaciones como WhatsApp. Basta con pulsar un botón específico en el teclado y comenzar a escribir y dibujar. Una vez acabado, la animación se crea y se envía a través de la aplicación en la que se está escribiendo. Siempre y cuando soporte el envío de GIF, claro está.
Otra de las funciones que ha captado nuestra atención tiene que ver con las notas. Más concretamente con las notas sobre la pantalla apagada del Samsung Galaxy Note 8. Aunque ya era posible hacer esto, lo que llama la atención es poderlo hacer de forma casi infinita. Y es que ahora se pueden enlazar hasta 100 notas. Así que las listas de la compra interminables o las reuniones con muchos puntos pueden ser puestas negro sobre blanco sin acceder a la app de notas. Realmente conveniente. Y si se toma en notas separadas, además de retomar la escritura en cualquiera de ellas, también se pueden juntar en una misma nota a posteriori.
Por último, es la herramienta de traducción lo que cierra el bloque del S Pen. Hasta ahora era más o menos fácil seleccionar una parte de un texto y traducirlo. Pues bien, Samsung ha mejorado la fórmula. Solo hay que seleccionar el idioma de entrada y de salida y apuntar con el S Pen a la frase en cuestión. Automáticamente, una ventana muestra la traducción de dicha frase. Sin pulsar más botones. Algo que permite la lectura de textos largos de forma realmente cómoda y sencilla. Y sin usar el Traductor de Google, por muy útil que sea.
Cámara Dual
Es otra de las características estrella de Samsung Galaxy Note 8. Una de las posibles razones de compra por la que elegir este dispositivo y no uno de los S8 o S8+. Su cámara principal está compuesta por dos objetivos. Uno es un gran angular de 12 megapíxeles y apertura de foco de 1.7. Es muy luminoso para captar todos los detalles de una escena amplia. El otro es un teleobjetivo con 12 megapíxeles y con apertura de f/2.4. Éste objetivo permite aplicar un zoom óptico x2, para conseguir más detalle en elementos lejanos. Lo bueno es que ambos objetivos tienen estabilizador óptico de imagen. Incluso aplicando el zoom por software, las fotos salen definidas y sin movimiento.
Con esta disposición, lo que permite el Samsung Galaxy Note 8 es saltar de un objetivo al otro rápidamente. Así podemos encuadrar toda una escena y, al instante, hacer zoom con el gesto de pellizco para centrarnos en algún detalle lejano. Todo ello con mucha comodidad y con buena calidad.
Pero lo que más llama la atención es su función Live Focus. Lo que ahora se conoce como modo Retrato gracias a Apple y su iPhone 7 Plus. Consiste en conseguir un efecto bokeh para las fotografías. Es decir, los objetos en primer plano se reconocen y enfocan, y el resto se desdibuja. Eso sí, Samsung lo hace con calidad y mucho mismo. Y es que podemos aplicar Live Focus a placer tanto antes como después de tomar la fotografía. Así no hay sorpresas. La aplicación de cámara captura una fotografía original y una segunda con la edición aplicada. Todo ello pudiendo volver a la galería en cualquier momento y devolver la fotografía a su estado original o para cambiar la intensidad del desdibujado.
El resultado es realmente bueno aunque se aplique vía software, y es que detecta muy bien los elementos. Si quieres conseguir fotos como si estuvieran captadas con una cámara réflex, este Samsung Galaxy Note 8 cumple sobradamente.
Compatibilidad mejorada con Samsung Dex
Pero Samsung ha creado un terminal destinado, sobre todo, al mundo profesional. A lo laboral. Para poder trabajar en cualquier momento y lugar sin portar nada más que el Samsung Galaxy Note 8. Bueno, o casi. Y es que Samsung ha desarrollado un interesante complemento llamado Samsung Dex. Una estación de trabajo valorada en 160 euros que permite ampliar los puertos de sus últimos terminales con el fin de conectarles a monitores, teclados y ratones. Sí, con el fin de convertir un móvil en un ordenador de sobremesa portable. Algo que con el Samsung Galaxy Note 8 mejora aún más dada su capacidad y sus añadidos exclusivos.
Por un lado, cuando insertamos el Note 8 en el Samsung Dex, no solo disfrutamos de un entorno de trabajo tipo Windows. Es decir, con un escritorio e iconos para lanzar las diferentes aplicaciones. También se trabaja con un sistema de ventanas. Pura multitarea. Así, aunque algunas aplicaciones no contasen con esta característica, a través del Samsung Dex es posible trabajar con ellas y con otras a la vez. Muy útil para buscar información de contactos en una aplicación y enviarla por correo en otra, por ejemplo. Y no solo eso. Samsung Dex también cuenta con toda clase de comandos muy parecidos a los de Windows para hacer la experiencia más cómoda y rápida a través del teclado. Así que trabajar con este sistema no difiere demasiado de la experiencia de la oficina.
Junto a ello, Samsung ha incorporado nuevas aplicaciones de productividad a Samsung Dex ahora que ha lanzado el Samsung Galaxy Note 8. Destaca la del correo electrónico, que mejora la gestión de todos los quehaceres y tareas gracias a su apartado de calendario, notas y contactos. Pero hay otras nuevas herramientas como la de videollamadas que son realmente convenientes para el ámbito profesional. Todo viene de serie y se integra a la perfección en el sistema de Samsung Dex.
Pero como no todo es trabajar, Samsung también ha mejorado su herramienta Game Launcher. Con ella es posible lanzar juegos directamente en este formato ordenador ampliando el tamaño de la pantalla. Es decir, jugando con una visión reescalada del juego original. Incluso hay títulos, como el famoso MOBA Vain Glory, completamente optimizados para Samsung Dex. Es decir, puedes jugar con el teclado y el ratón como si lo hicieras delante de un ordenador real. Desde luego queda claro que a alguien dentro de Samsung le gusta jugar.
Pantalla infinita de 6,3 pulgadas
No cabe duda que la pantalla del Samsung Galaxy Note 8 es la protagonista de su frontal. Al fin y al cabo es una pantalla infinita. Toda esta vista está ocupada por el panel, a excepción de los marcos superior e inferior. Y sí, Samsung sigue apostando por los paneles Super AMOLED para el disfrute de todos. Algo que permite contar con una imagen algo saturada pero muy brillante y con colores realmente definidos. De hecho logra representar más de 16 millones de tonos diferentes.
Esta tecnología también se apoya en el Mobile HDR Premium que ayuda a mostrar colores claros en escenas con mucha luminosidad o mucha oscuridad. Así el espectro de colores queda cubierto y la imagen resultante se ve definida y colorida sin importar la situación. Por no hablar de los negros puros que consigue al apagar los píxeles que no requieren color. Elementos que dotan a la imagen de una gran calidad y una definición propia de la gama alta. Es, posiblemente, la mejor experiencia de visionado del mercado hoy en día. Su brillo ayuda a que la pantalla y los colores se vean con claridad a plena luz del día, aunque el acabado de cristal puede reflejar en algunas condiciones.
Pero no solo la tecnología del panel es el causante de toda esta calidad. Samsung también apuesta por altas resoluciones para mostrar todo lujo de detalles. Esta pantalla es capaz de mostrar imágenes en calidad QHD+. Es decir, resolución propia del cine. 4K. Ahora bien, lo hace en un formato más alargado (por eso el símbolo +), superando los 16:9 de una pantalla normal. Un formato aún más alargado, como pasaba con los S8 y S8+, para disfrutar de una vista panorámica más cómoda y natural para el ojo humano.
Diseño Premium
Es el primer pensamiento de cualquier usuario y el broche de oro de este repaso. Sí, se parece mucho al S8+, pero eso no es nada malo. De hecho, es algo que consigue dotar a este terminal de un aura de calidad y objeto de diseño que tanto buscan los fabricantes. Samsung lo ha logrado con el Samsung Galaxy Note 8. No solo es bonito, también es cómodo y genera unas sensaciones de objeto Premium realmente agradables. La pantalla edge o curvada es realmente estilosa, y junto al diseño frontal de la pantalla infinita, consiguen distinguir a este terminal del resto.
Es grande. Mucho. No cabe ninguna duda. Mide, concretamente, 162,5 x 74,8 x 8,6 milímetros. Y pesa 195 gramos. Sin embargo se puede sujetar firmemente en la mano gracias a sus bordes redondeados. No cansa. Es ergonómico además de elegante. Cabe mencionar que, respecto al S8+, sus formas son más cuadrangulares, con esquinas más marcadas, aunque redondas. Todo ello con materiales Premium como metal y cristal para darle resistencia y ligereza, a pesar del tamaño. Por cierto, su certificación IP 68 se aplica tanto al terminal como al S Pen, incluso cuando este se ha extraído y el receptáculo queda abierto al polvo o al agua. Eso sí, no se recomienda mojar con agua salada.
Además, hay que hablar del tono azul que Samsung ha decidido incluir entre los modelos que llegarán a Europa. El negro y el dorado son bonitos y elegantes. Sin embargo, el azul eléctrico es todo un acierto para conseguir un aspecto algo más juvenil y menos serio, aunque igualmente llamativo y elegante. Personalmente, nos ha encantado.
La única pega que le podemos aplicar a este apartado es su acabado tipo espejo. Es brillante y muy elegante, pero fatal para quienes tenemos los dedos grasos. Las huellas quedan marcadas por doquier desde que se toma en las manos por primera vez. También es criticable la ubicación del lector de huellas. Su posición elevada en el dorso del terminal hace que tengamos que buscarlo con el índice junto a las cámaras. No resulta cómodo dada la altura del móvil, ni práctico si queremos desbloquear el terminal cuando está sobre una mesa.