Samsung pagará más de 450 millones de euros a Apple por copiar su iPhone

Hace ya seis años y en tan solo tres días, en un movimiento extrañamente rápido para los mecanismos generalmente lentos de la justicia norteamericana, Samsung fue declarada culpable por copiar, en su gama alta el diseño de los terminales iPhone de Apple. Y ahora la Corte Federal estadounidense ha hecho público el resultado de ese veredicto. La compañía surcoreana tendrá que pagar a Apple la cantidad de 533.316.606 de dólares (455.717.690 al cambio) por infringir sus patentes en el diseño de terminales propios.

Una multa que pone fin a 6 años de litigio

Apple exigía, por su parte, mil millones de dólares, quedándose al final la cuantía en aproximadamente la mitad. Además, y como pena adicional, Samsung tendrá que abonar, también, 5,3 millones de dólares a los de Cupertino por haber violado, en concreto dos patentes de su diseño. En total, la firma coreana tendrá que entregar a Apple una cantidad total aproximada de 538 millones de dólares, casi 460 millones de euros al cambio.

Así sería la pantalla del próximo iPhone 9

La resolución de la sentencia pone fin a un litigio que lleva ensombreciendo la relación de estas dos compañías durante 6 años. Una relación que, a día de hoy, se mantiene ya que Samsung fabrica y vende a Apple las pantallas OLED que llevan sus iPhone. Este acuerdo, que le reporta a Samsung pingües beneficios cada año, puede estar, no obstante, sobre la cuerda floja, ya que Apple afirma que para la fabricación de su próximo iPhone X Plus va a contar con otro fabricante de paneles, en concreto de la marca LG.

Si este litigio ha durado casi seis años es porque en enero de 2017 el caso se reabrió de manera oficial por parte del Tribunal de Apelaciones  de los Estados Unidos. Entre los diseños que Samsung ha copiado del iPhone se encuentran la parte frontal rectangular con los bordes redondeados y los iconos en cuadrícula. Para diseñar el primer Samsung Galaxy S copieron dichos elementos del iPhone 3gs, manteniéndolos en modelos posteriores. En aquel entonces, la cuantía que Samsung debía pagar a Apple por infringir sus patentes no estaban del todo claras. Existían dos formas de compensación. Una por el total de ventas de la línea de los Samsung Galaxy S o, simplemente, por los componentes individuales que había imitado en sus terminales. Al final, el veredicto se ha decantado por la primera de las posibilidades, algo con lo que Apple se muestra bastante satisfecha.

Mantente al día

De lunes a viernes mandamos un único newsletter con los titulares a +4.000 suscriptores

I will never give away, trade or sell your email address. You can unsubscribe at any time.