Os ponemos en situación. Charlie Miller es un conocido investigador de seguridad de los productos de Apple. Para ello, este buen hombre ha tenido que pagarse el mismo la licencia como desarrollador para poder investigar los puntos negros del sistema operativo que lleva instalado el móvil de los de Cupertino, aunque la misma Apple invitó al investigador a unirse con ellos.
El último descubrimiento lo hacía hace tan solo unos días. Y para demostrarlo, grabó un vídeo en el que se podía ver como una sencilla aplicación de carácter inofensivo instalada en un iPhone 4, se saltaba todas las medidas de seguridad de la tienda de aplicaciones de Apple. Pero, ¿qué se conseguía al instalar esta aplicación? Muy simple, poder acceder al equipo en cuestión desde cualquier ordenador de manera remota o a distancia.
Charlie Miller demostraba en vídeo, que una vez instalada la aplicación en el terminal, ya sea iPhone, iPad o iPod Touch, el equipo quedaba al descubierto, pudiendo el pirata informático más conocido como hacker, acceder a toda la información personal que el usuario guarda en su terminal: ya sean fotografías, listas de contactos, correos electrónicos, etc…
El investigador, que anteriormente había trabajado para la La Agencia de Seguridad Nacional, iba a mostrar en Taiwán durante un evento sobre seguridad informática, cuál era la manera en la que los equipos móviles de Apple quedaban al descubierto. Sin embargo, los de Cupertino se percataron de lo que intentaba Miller.
Y para desgracia de éste, el investigador veía como su licencia para pertenecer al programa de desarrolladores de Apple quedaba anulada -aún no se sabe si por tiempo indefinido- y, la aplicación maliciosa era retirada de la tienda de Apple. Toda esta historia ha sido seguida por el portal Forbes, que ha intentado ponerse en contacto con Apple y por el momento no se han pronunciado al respecto.
Estas cosas haran que los humos de apple se bajen un poquito y a sus incondicionales que solo ven por los ojos de esta compañia y las dmas son pura basura,