La próxima generación de smartphones de gama alta de Samsung no sólo contará con novedades en lo técnico, sino que también servirá para engrosar el catálogo de funciones inteligentes y de accesibilidad que se insertan en Android. Así, según hemos podido conocer a través de SamMobile, la multinacional surcoreana estaría trabajando en una nueva interfaz que se adaptaría para que el usuario pueda controlar los comandos táctiles con una mano. La idea es que las aplicaciones, los teclados o los conjuntos de iconos se adaptaran a la orientación de sujeción en cada momento.
Para ilustrar este funcionamiento, hagamos un ejercicio de imaginación. Por decirlo de un modo más o menos gráfico, supongamos que los contenidos que se muestran en pantalla estuvieran imantados con una carga y el dedo pulgar de la mano que sostiene el teléfono con la carga contraria. Al detectar el dispositivo que lo hemos agarrado con la mano izquierda o con la derecha, en posición horizontal o vertical, todos aquellos elementos en pantalla que presenten un comportamiento táctil se redistribuirían por toda la superficie en torno al recorrido que seguiría naturalmente el dedo pulgar, de modo que estén a su alcance para controlar las funciones disponibles. Se generaría, así, lo que la patente publicada por SamMobile define como zona de confort.
Según el citado medio, esta nueva interfaz inteligente y dinámica podría ser una de las grandes novedades que veríamos en el Samsung Galaxy S5 más allá del apartado puramente técnico. La cuestión es si estaríamos hablando de una característica que se centraría en exclusiva en el próximo buque insignia o si, por contra, pasaría a incorporarse también a las prestaciones de equipos anteriores, como los Samsung Galaxy S4, Samsung Galaxy Note 3 y demás modelos previos. De hecho, la posibilidad de que se incluya esta característica en los terminales con pantallas amplias, o tabletófonos, sería muy atractiva, dada la dificultad que supone controlar un panel de más de cinco pulgadas.
El Samsung Galaxy S5, recordemos, estaría programado para su presentación y lanzamiento entre los meses de febrero y marzo de 2014. La producción masiva de la primera hornada ””compuesta, según se ha filtrado recientemente, por un montante de entre 800.000 y 1.000.000 de unidades”” tendría durante durante el próximo mes de enero. Se ha dicho que el Samsung Galaxy S5 tendrá una pantalla de cinco pulgadas, posiblemente de alta densidad (2.560 x 1.440 píxeles).
La cámara estaría basada en una unidad de 16 megapíxeles, y en su interior tendría un procesador de ocho núcleos y 64 bit. Se ha planteado la posible existencia en los planes de Samsung de lanzar un modelo del Samsung Galaxy S5 con otro chip, el Snapdragon 805 HD, igualmente potente y perfecta para poder capturar contenidos en UHD (ultra alta definición). Nos encontraríamos con una memoria RAM de tres GB y, según los últimos indicios, una construcción que se basaría en una carcasa exterior de metal.